Fabra pasa de 'indignado' a 'avergonzado' en tres semanas
Considera "una vergüenza" las manifestaciones que antes de las elecciones veía "estupendas"
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El presidente provincial del PP, Carlos Fabra, ha modificado sustancialmente la apreciación que tenía durante la campaña electoral de las manifestaciones de los indignados. Lo que el pasado día 18 de mayo, cuatro días antes de las elecciones, veía "razonable" y "estupendo" es ahora "una vergüenza" para el polémico dirigente conservador.
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Fabra ha calificado hoy de "auténtica vergüenza" que continúen las concentraciones del 15-M en los lugares públicos, un calificativo que también ha utilizado para comentar los incidentes de ayer en las inmediaciones de Les Corts durante la sesión constittiva del parlamento autonómico.
El aún presidente de la Diputación de Castellón, ha hecho estas declaraciones hoy en Castellón al ser preguntado por la decisión del ministro del Interior de no acudir esta tarde a un acto en Valencia por "prudencia", tras los incidentes de orden público de ayer con los "indignados" del movimiento 15 M.
Carlos Fabra ha criticado que "las calles y las instituciones puedan ser tomadas y la gente sea insultada libremente por gente que ya no es la misma que inició el movimiento".
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Sus palabras contrastan con las declaraciones que él mismo hacía el pasado 18 de mayo cuando aseguraba que "lo único" que hacían los 'acampados' era demostrar la situación de España. A cuatro días de las elecciones del 22M, calificada al movimiento de "una respuesta bastante correcta por parte de la juventud" y aseguraba que le parecía "estupendo" que se manifestaran.
El conservador ha justificado su cambio de postura alegando que "cuando se inició el movimiento había mucha gente que realmente estaba harta y seguirá estándolo, pero que no quiere complicarse con gente antisistema, como muchos de los que hay ahora y que son responsables de esta situación".
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Fabra dice ahora que hay perjuicio para comerciantes, para viandantes y para vecinos
Según Fabra, el Ministerio del Interior y el Gobierno de España, "si es que existe", tendrá que tomar alguna decisión, ya que "no se puede insultar violentamente al senador Lerma ayer mientras se acercaba, ni a mis diputadas que les insultaron mientras iban al coche y tuvieron que ser escoltadas por la Policía Nacional hasta el aparcamiento".
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Esta situación, ha dicho es "una auténtica vergüenza", como la que se da en Castellón, donde se está permitiendo una concentración "delante de la propia Subdelegación del Gobierno con perjuicio para comerciantes, para viandantes y para vecinos".
Fabra ha asegurado: "estamos en un país democrático y, el que quiera ir a las urnas, que vaya a las urnas, y el que no, que no vaya y se manifieste cuando crea y se le autorice, como todo hijo de vecino, y asunto terminado".
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"A lo mejor -ha agregado Carlos Fabra- el señor Rubalcaba está más preocupado en estos momentos por otras cosas que en explicar las cosas que tiene que explicar. Ya se le ha visto poco explicativo en el caso Faisán, y aquí parece también que escurre el bulto".