Dimisión sin explicaciones
Luis Díaz Alperi, alcalde de Alicante, anuncia su marcha en una rueda de prensa convocada con media hora de antelación y sin aceptar preguntas sobre sus motivos
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Todo el mundo en Alicante esperaba la dimisión del alcalde, Luis Díaz Alperi, pero todo el mundo se sorprendió del momento y la forma que eligió el jueves para hacer el anuncio. Tras años de repetir ante los periodistas su cansancio y su intención de dejar el cargo, el primer edil comunicó su decisión en una rueda de prensa de urgencia, convocada con media hora de antelación, en la que no explicó las razones de su marcha ni admitió preguntas al respecto.
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El momento elegido no puede ser más inoportuno: Díaz Alperi deja su cargo pocas semanas antes del inicio de la celebración en Alicante de un gran evento, la Volvo Ocean Race, que el PP ha publicitado hasta la saciedad durante los últimos meses. Además, el alcalde se va 24 horas después de haber amenazado públicamente a los concejales socialistas con retirarles el sueldo porque no están haciendo oposición “como es debido”. Con este gesto, confirmó su fama de político autoritario, labrada durante los 14 años que lleva al frente del ayuntamiento alicantino.
Francisco Camps, presidente de la Generalitat valenciana, y José Joaquín Ripoll, jefe provincial del PP, acompañaron al alcalde en su comparecencia pero no contribuyeron a arrojar luz sobre los motivos de su dimisión. Tampoco hubo respuestas desde el entorno del alcalde a lo largo de la tarde. Para más incertidumbre, Díaz Alperi tiene un largo historial de implicaciones en escándalos de corrupción que tendrían mucho que ver, según afirma la oposición, con una marcha tan precipitada.
El primer edil anunció que el viernes hará efectiva su dimisión y nombró a su sucesora: Sonia Castedo, concejala de Urbanismo. Ricardo Costa, portavoz del PP en el País Valenciano, subrayó sus méritos y se mostró seguro de que será “una grandísima alcaldesa”. El portavoz socialista en Alicante, Roque Moreno, recogió el sentir de los partidos de izquierdas -de los que sólo el PSOE tiene representación en el consistorio- cuando calificó la dimisión de “fraude”: “Si ya tenía pensado irse, no tenía que haberse presentado a las elecciones”, afirmó.