Catalunya pide 5.023 millones como rescate, y dice que no aceptará "condiciones políticas"

Catalunya pide el rescate al Estado. La Generalitat ha solicitado hoy al Gobierno español adherirse al Fondo de Liquidez Autonómico, al que pedirá prestados 5.023 millones de euros, pero ya ha advertido de que no aceptará "condiciones políticas" para disponer de unos recursos "que son de los propios catalanes".

El portavoz del gobierno catalán, Francesc Homs, ha precisado que el Govern usará estos recursos (de un fondo dotado con 18.000 millones de euros) para cumplir con el déficit público al que está obligado (el 1,5% del PIB a finales de 2012) y para refinanciar "vencimientos pendientes" de aquí a final de año (afronta vencimientos de deuda por más de 5.700 millones en la segunda mitad del año).

La Generalitat ha concretado esta solicitud de adhesión al Fondo de Liquidez en su primera reunión después de las vacaciones de verano. Catalunya, la tercera comunidad autónoma que reconoce junto a la Comunidad Valenciana y Murcia que precisa ayuda de este fondo cuya finalidad es inyectar liquidez a las regiones con dificultades para refinanciar sus deudas, lleva pidiendo desde hace un año la introducción de un mecanismo de mutualización de deuda para las regiones españolas que propicie una reducción de sus costes de financiación.

El Fondo de Liquidez, anunciado por el Gobierno de Mariano Rajoy en julio pero pendiente de entrar en funcionamiento, estará dotado con unos 18.000 millones de euros procedentes de fondos del Tesoro, de la Lotería Nacional y préstamos bancarios. Las autonomías que decidan adherirse al fondo tendrá que cumplir unos estrictos condicionamientos presupuestarios y financieros, además de presentar al Gobierno un plan de ajuste e informarle puntualmente de sus correspondientes ejecuciones presupuestarias.

Se estima que un total de seis regiones españolas necesiten el rescate del Gobierno central. Las tres que ha han confirmado que solicitarán ayuda del Fondo consumirán casi la mitad de su dotación. La Comunidad Valenciana fue la primera en confirmar que pedirá el rescte, y cifró en 3.500 millones sus necesidades financieras para 2012. Murcia fue la segunda; pedirá al fondo unos 300 millones de euros. Ahora ha sido Catalunya. Entre las tres suman 8.800 millones, casi la mitad de los 18.000 millones con los que cuenta inicialmente. Sin embargo, el Gobierno dejó claro que la cifra final del fondo dependerá de las cantidades que requieran los gobiernos autonómicos.

El PSC ha pronosticado hoy que la petición del gobierno catalán acarreará nuevos ajustes en Cataluña y limitará el autogobierno, por lo que los socialistas piden a la Generalitat que ponga negro sobre blanco las condiciones que implicará esta ayuda. "El fondo es la peor fórmula posible para financiar la tesorería de la Generalitat, porque es el sistema que más limita el autogobierno. Es paradójico que se haya acogido a este mecanismo un Govern que dice defender la hacienda propia catalana", ha dicho hoy el portavoz del PSC, Jaume Collboni, en rueda de prensa.

Para el PSC, la decisión que hoy ha tomado el ejecutivo catalán se enmarca en la política "errática y suicida" de buscar fórmulas de financiación que tienen, a su juicio, tanto el Gobierno central como el de la Generalitat.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no ha aclarado este viernes si la concesión del rescate solicitado por Catalunya supondrá algún tipo de exigencia a la administración que preside Artur Mas o si, por el contrario no pondrá "condiciones políticas" como le ha exigido la Generalitat catalana. 

En rueda de prensa tras su reunión con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, Rajoy ha reconocido que Catalunya "tiene un problema de liquidez"y ha garantizado que el Estado prestará al Govern el dinero que le pide. Según ha dicho el jefe del Ejecutivo esto no es algo nuevo ya que desde enero son varias las comunidades autónomas a las que se les ha prestado dinero. Ha citado, entre ellas, a Andalucía y al País Valencià. 

Rajoy ha asegurado que "las comunidades autónomas son también España" por lo que el Gobierno "no se va a desentender" de sus problemas.