Sacyr ha logrado que Hacienda le devuelva 42,1 millones de euros, correspondientes al Impuesto de Sociedades pagado entre los años 2004 y 2006, y parte de 2007, al estimar la Audiencia Nacional parte del recurso interpuesto por el grupo.

En virtud de la sentencia, emitida el pasado mes de febrero, la compañía que preside Manuel Manrique recibirá una devolución de 34,4 millones, más intereses de 7,7 millones, que, según la empresa, tendrán "efecto positivo" en caja. Además, esta resolución permitirá a la compañía de construcción y concesiones recuperar avales de 45 millones, tal como adelanta El Confidencial.

El objeto del contencioso entre Sacyr y Hacienda eran las deducciones por actividad exportadora relacionada con inversiones en el extranjero.

En su sentencia, la Audiencia Nacional estima las pretensiones de la constructora sobre las deducciones aplicadas por actividad exportadora y anula una sanción en relación a una doble imposición. Según el grupo, aunque contra la sentencia cabe recurso de casación, no impide que el fallo se ejecute.

La constructora que preside Manuel Manrique, además, ha lanzado emisión de bonos convertibles por 175 millones de euros para afrontar el vencimiento de una emisión colocada en 2014. Con la operación, la compañía sustituirá esta deuda titulizada, alargará su vencimiento y rebajará su coste. Los nuevos títulos se emiten a un tipo de interés trimestral de entre el 3% y el 3,75%, mientras que la emisión actual devenga un 4%.

A la conclusión de 2018, el grupo presentaba un pasivo de 4.045 millones de euros, un 18% superior al del año anterior. El aumento derivó fundamentalmente del préstamo que firmó en para afrontar la devolución de los 225 millones que en su día recibió de Panamá como anticipos para construir la ampliación del Canal.

Sacyr afronta el vencimiento de los bonos que lanzó en 2014 y sigue trabajando para acotar la deuda mientras al cierre del pasado año dio por concluida la primera fase de su plan estratégico, centrada precisamente en la reducción de deuda y el reforzamiento de la internacionalización.

La noticia de la emisión no sentó bien a las acciones de la constructora que bajaron un 8,93% en la sesión de Bolsa de este miércoles. Los títulos de la compañía  concluyeron la sesión en 2,10 euros, precio que si bien supone un mínimo desde el pasado mes de febrero, permite aguantar por encima de la cota de los dos euros y evitar por tanto entrar en mínimos anuales