El presidente de BBVA, Carlos Torres, afirmó este viernes que, aunque el banco espera que la recuperación económica continúe en 2022, la guerra en Ucrania aumentará la inflación y afectará "negativamente" al crecimiento "con importantes diferencias entre países". Torres hizo esta afirmación durante su intervención en la Junta General de Accionistas que el banco celebró este viernes en Bilbao con presencia física de accionistas.

"Asistimos con verdadero horror a terribles acontecimientos por la invasión de Ucrania por parte de Rusia, algo que creíamos superado en Europa", lamentó el presidente de BBVA, añadiendo que "más allá de su impacto en la geopolítica y en la economía mundiales, que es grande, supone una enorme tragedia humana".

Torres señaló que esta guerra aumenta "de manera significativa" la incertidumbre sobre la evolución de la economía global y que eso se refleja en las caídas en los mercados financieros, el "fuerte aumento de la volatilidad" y las "acusadas subidas" de los precios de las materias primas como el petróleo y el gas.

En este punto, aseveró que "no hay duda de que la guerra aumentará la inflación y afectará negativamente al crecimiento, aunque con importantes diferencias entre países" y puntualizó que la magnitud del impacto dependerá de factores como la respuesta de las políticas monetaria, fiscal y regulatoria.

También consideró que la guerra tendrá "importantes repercusiones estructurales en la geopolítica y en la economía mundial, condicionando las relaciones internacionales en todos los ámbitos".

En este sentido, afirmó que se presenta "un nuevo orden mundial, en el que primará la autonomía en cuestiones estratégicas como la energía, alimentos, materias primas, tecnología, defensa, y datos" y que éste es "un mundo bien distinto al de la globalización creciente de las últimas décadas".

Torres valoró la actuación "inmediata y coordinada" de Europa en esta crisis y destacó que se lanza una señal de "compromiso con una mayor integración europea".

En lo que respecta a las medidas en materia energética, el presidente de BBVA apostó por que Europa camine hacia "una mayor independencia" y que eso sirva para "movilizar la economía hacia las energías renovables con mayor celeridad si cabe".

El máximo responsable de BBVA trasladó ánimo a los refugiados y a los que "luchan por su vida en libertad", y deseó que el conflicto sea "breve", aunque mostró disposición a dar apoyo "si se prolonga mucho tiempo". Repasó que el banco ha donado un millón de euros para apoyar iniciativas puestas en marcha sobre el terreno por Unicef y Acnur, ha recaudado 1,7 millones de euros en aportaciones de accionistas, empleados y clientes, y ha puesto a disposición de las autoridades diversos espacios para acoger a refugiados.

Carlos Torres aseguró que BBVA afronta este "contexto incierto" desde una posición de "gran fortaleza". En este sentido, recordó que han logrado en 2021 el mayor beneficio recurrente de la última década (5.069 millones) y se cerró el año con un "elevado" ratio de capital de 12,75%.

A este respecto, el consejero delegado de BBVA, Onur Genç, afirmó en su intervención en la junta  que los indicadores de riesgo de la entidad "se sitúan mejor que en los niveles pre-covid", destacando los resultados que el banco obtuvo durante 2021. Genç explicó que estos resultados se deben, principalmente, al "buen comportamiento" del negocio subyacente del banco, en concreto, "por la buena evolución del margen neto y por unos menores saneamientos".

También destacó el "magnífico desempeño" de los países en los que BBVA opera, con una evolución "muy positiva" de los ingresos recurrentes y una mejora de la eficiencia.

Genç recordó también algunos de los objetivos que se ha marcado el banco como aumentar en diez millones la base de clientes en los próximos tres años, aumentar el patrimonio neto tangible por acción incluyendo los dividendos en un promedio anual del 9% y duplicar la financiación sostenible hasta los 200.000 millones  en 2025.

Intervención de los accionistas

Durante el turno de intervención para los accionistas, el expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, pidió que dimita casi en su totalidad el consejo de administración del banco, excepto el consejero delegado, Onur Genç, o en su defecto, que se nombre una comisión independiente de personas "de garantía" que colabore con la Justicia en la investigación del caso Villarejo.

En su intervención, Del Rivero señaló que en octubre de 2021, el exdirector de seguridad de BBVA Julio Corrochano presentó un escrito en el que comentaba que, desde 2004, el banco trabajaba con el ahora comisario jubilado José Manuel Villarejo. "Pero, explícitamente, dice que contrató en 2016 y 2017" a Villarejo. "En el 2016 y en el 2017, el actual presidente era consejero delegado" del banco, en referencia a Carlos Torres. "Esto hace difícil que, para el banco que está imputado, pueda acogerse a los eximientes del artículo 31 bis del Código Penal, puesto que era ya públicamente conocido que Villarejo era policía en activo, ha añadido Del Rivero.

También intervinieron los sindicatos CCOO, ACB, CGT, UGT, SEC, CIG, ELA y SCAT que se quejaron de la presión comercial que sufren los empleados del banco y a la falta de recursos humanos y materiales, que se ha visto acentuada por las salidas de empleados en el marco del despido colectivo que el banco está llevando a cabo.

En su respuesta, Carlos Torres anunció que prevé lanzar un ambicioso plan en España para dar más voz a los empleados y mejorar los estilos de liderazgo al objeto de contar con los mejores responsables de equipo, al tiempo que se ha opuesto a "cualquier extralimitación o exigencia comercial desmedida" y ha confirmado que BBVA no contempla actualmente el cierre de más oficinas.

El presidente de BBVA dijo ser consciente de que el proceso de reducción de plantilla, junto a las numerosas bajas por contagios y cuarentenas de coronavirus, han provocado "desajustes y situaciones de falta de personal" que desde el banco han trabajado en solventar y que, a medida que se vayan reduciendo las restricciones y mejore la situación sanitaria, se irán aliviando.

En cualquier caso, Torres Vila ha asegurado que BBVA seguirá mejorando en este sentido, por lo que este año va a trabajar en acometer diferentes planes de acción e iniciativas basadas en las personas.

Otros accionistas y sus representantes, entre ellos Adicae, incidieron durante el turno de intervenciones en la reducción de la red de oficinas y la necesidad de que el banco proporcione una mejor atención a las personas mayores, evitando que la digitalización deje a algunos clientes desatendidos.

Torres aseguró que, en estos momentos, no se contempla el cierre de sucursales. "Queremos además estar muy cerca de nuestros clientes y dar el mejor servicio para no dejar a nadie atrás. Estamos adoptando medidas para ayudar a los colectivos con mayores dificultades de adaptación, como las personas mayores, personas con necesidades especiales u otras que por otros factores puedan verse excluidas de la digitalización", ha afirmado.

La junta general de accionistas de BBVA aprobó la reelección del presidente del banco, Carlos Torres, y del consejero delegado, Onur Genç, como consejeros ejecutivos por un periodo de tres años más, así como al pago de un segundo dividendo en efectivo con cargo a 2021 de 23 céntimos que se abonará el próximo 8 de abril.

La junta votó a favor también del nombramiento de la excomisaria europea de Acción por el Clima Connie Hedegaard como nueva consejera, con lo que la representación de mujeres en el consejo de administración del grupo alcanzará el 40%, con 6 miembros de un total de 15.