La dirección de GE-Alstom y los sindicatos pactan un ERE para 236 trabajadores

MADRID.- UGT y CCOO han alcanzado un preacuerdo con la dirección de la división de energía de General Electric (GE) adquirida a Alstom para definir el expediente de regulación de empleo (ERE) anunciado por la compañía, que afectará finalmente a 236 trabajadores en España.

El principio de acuerdo, que deberá ser ratificado en asamblea de trabajadores este viernes, afecta a 102 empleados de las instalaciones de Buñuel, a 45 del colectivo de Parques Operación y Mantenimiento, y 89 del colectivo de oficinas centrales de Barcelona, indica UGT en una nota.

Los sindicatos alcanzaron el preacuerdo este miércoles tras una negociación que se inició a las 9.00 horas de ayer martes y que se prolongó durante un día. El encuentro constituye la primera de las tres mesas abiertas que ha concluido en el periodo de consultas.

El preacuerdo establece un plan de bajas voluntarias para todos los trabajadores menores de 57 años, que percibirán una indemnización bruta de 45 días por año de servicio, con un tope máximo de 24 mensualidades, más una indemnización bruta lineal de 10.000 euros.

Además, se contempla un plan de prejubilaciones para mayores de 57 años en dos fases. En la primera, durante el periodo de percepción de las prestaciones contributivas de desempleo, los trabajadores entre 57 y 62 años percibirán el 80% del salario regulador neto hasta la finalización de la prestación o hasta que cumplan los 63 años.

También en esta primera fase, los trabajadores con más de 63 años percibirán también el 80% del salario regulador neto hasta que alcancen la edad de jubilación, con unas revalorizaciones del 0,5%, indica UGT.

En la segunda fase, desde que agoten su prestación por desempleo y hasta que cumplan los 63 o 65 años, los afectados percibirán un complemento equivalente al 80% del salario neto con revalorizaciones del 0,5%. Los trabajadores incluidos en el plan de rentas que no opten por la prejubilación percibirán una indemnización de 20 días por año con un tope de 12 mensualidades.

Paralelamente, sindicatos y empresa han acordado dos planes de recolocación, uno interno y otro externo, en ambos casos voluntarios. En el plan interno el trabajador podrá optar por otros puestos en los centros de trabajo de la empresa o de otras empresas de GE para cubrir vacantes previas al extinción.

En caso de que el trabajador afectado no se adhiera al plan, percibirá una indemnización bruta de 45 días de salario por año con un tope de 24 mensualidades.

A este plan pueden optar 13 trabajadores de la planta de Buñuel, con un periodo de adaptación de entre tres y seis meses. Si optaran por el centro de Noblejas (Toledo), percibirán una compensación adicional de 10.000 euros en caso de que decidan ocupar el puesto de trabajo. Además, se establecen otras compensaciones por movilidad geográfica.

Respecto al plan de recolocación externo, que será llevado a cabo durante los 12 meses siguientes a la extinción del contrato, contiene acciones efectivas dirigidas a la orientación y formación profesional para la capacitación en el desempeño de las ofertas de trabajo existentes.

Dado el impacto del cierre de la planta de Buñuel, sindicatos y empresa han acordado que GE ponga en marcha un plan de reindustrialización para la búsqueda de una alternativa industrial y de empleo para todos los trabajadores afectados por el despido colectivo.

Finalmente, y atendiendo a las dificultades de reinserción laboral del colectivo de mayores de 55 años, las partes acordaron una indemnización adicional consistente en un importe de 3.500 euros brutos por año trabajado con un límite máximo de 30.000 euros brutos.

Para UGT FICA, el preacuerdo alcanzado supone una mejora en las condiciones laborales de los trabajadores afectados con relación a la propuesta inicial presentada por la empresa, que era uno de los objetivos perseguidos por la federación.

El sindicato espera que, de ratificarse el preacuerdo por parte de los trabajadores, la dirección de General Electric se comprometa en la búsqueda de una alternativa industrial para la planta de Buñuel que represente el mínimo impacto para el empleo industrial de la región.