Brufau presidirá Repsol hasta 2019 mientras Imaz asume todo el poder en la petrolera
La compra de la canadiense Talismán la próxima semana abre una nueva etapa en la multinacional española
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MADRID.- El presidente de Repsol, Antonio Brufau ha decidido renunciar al cobro de las compensaciones económicas a las que tenía derecho al término de su contrato como primer ejecutivo de la petrolera, al tiempo que presidirá la compañía hasta 2019
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Los accionistas han dado su visto bueno a este traspaso ordenado de poderes en la multinacional, que abre una nueva etapa de desarrollo con la compra de la canadiense Talisman en un entorno de bajos precios del petróleo.
Brufau renuncia al blindaje de 14,2 millones tras ceder sus tareas ejecutivas; a partir de ahora ejercerá funciones institucionales
El cese en las funciones ejecutivas constituía uno de los supuestos por los que Brufau tenía derecho a recibir una compensación económica por 14,2 millones, justificada a modo de blindaje. A partir de ahora, ejercerá "determinadas funciones institucionales", pero tendrá "un papel relevante en la fijación y supervisión de la estrategia a medio y largo plazo en las relaciones institucionales con la Administración, accionistas y otros grupos de interés y en la supervisión de las tareas de dirección".
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Imaz, artífice de la operación Talisman, dirigirá el futuro de Repsol en un nuevo ciclo de expansión en momentos complejos para el sector por el desplome de los precios del crudo, que está forzando recortes de producción, inversión y plantillas.
"Una nueva Repsol nace el 8 de mayo, con desafíos y retos ... que provienen de factores de entorno (precios, crecimiento económico) y también retos propios, el primero concluir con éxito la integración de Talisman", dijo el ejecutivo vasco en su discurso, recordando que el grupo presentará un nuevo plan estratégico a 2020 antes de final de año.
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Otros puntos aprobados por los accionistas fueron las cuentas de 2014 (año en que la petrolera multiplicó por ocho su beneficio neto por los fondos conseguidos con su salida de Argentina), el dividendo cercano a un euro por acción y la modificación de varios estatutos de su reglamento.