El Gobierno de Argentina ha dado el primer paso para hacerse con el control de la petrolera YPF, la filial de Repsol en el país.

Según el diario Clarín, el Ejecutivo de Cristina Fernández ha redactado un proyecto de ley que enviará al Congreso en el que declara de 'utilidad pública y sujeto a expropiación el 50,01% de las acciones clase D de la petrolera'. De ese tipo de títulos, YPF tiene actualmente 393 millones, de los cuales Repsol tiene un 57,43% y un 25,46% el Grupo argentino Petersen de la familia Eskenazi. El 17,09% restante flota en bolsa y un 0,02% ya está en poder del estado argentino. 

Las acciones sujetas a expropiación son las 100 millones que el Grupo Petersen tiene en su poder y más de 96 millones de los títulos de Repsol. El texto establece que si es necesario expropiar más acciones para que el Estado argentino llegue al 50,01%, esos títulos se expropiarán de tal modo que se respeten las proporciones en poder de los otros accionistas, según recoge el diario argentino.

Soria amenaza al Gobierno argentino si hay 'hostilidad' contra empresas españolas 

Fuentes del Congreso consultadas por Efe han declarado que aún no han recibido ningún proyecto de ley del Gobierno sobre YPF, aunque otras fuentes del sector petrolero han señlado que la iniciativa podría entrar en el Parlamento las próximas horas.

La información de Clarín llega el mismo día en el que el presidente de Repsol, Antonio Brufau, se reúne con el ministro argentino de Planificación, Julio de Vido, como parte de los esfuerzos de la petrolera por encontrar soluciones a las diferencias entre el Gobierno del país e YPF. Diferencias que el ministro español de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, se ha encargado de alentar después de amenazar al Gobierno argentino con que cualquier 'gesto de hostilidad' contra empresas españolas tendrá 'consecuencias'.

'Si en alguna parte del mundo hay gestos de hostilidad contra los intereses de las empresas españolas, el Gobierno los interpreta como hostilidad a España y al Gobierno de España', ha afirmado desde Varsovia en unas declaraciones difundidas por los servicios de comunicación del Gobierno.

Seis provincias argentinas han revocado sus permisos a la filial de Repsol

En las últimas semanas, seis provincias argentinas han revocado sus permisos a la filial de Repsol. A ellas se han sumado las amenazas de otras dos regiones que exigen también una mayor inversión a la compañía. Además, la provincia de Santa Cruz, al sur del país, y que ya había retirado dos áreas a YPF, decretó ayer la caducidad de la licencia de la petrolera para operar en otras tres áreas apenas horas después de que la compañía presentara un plan de inversiones hasta 2017 para esa región por importe de 4.379 millones de dólares. 

Pese a que el Gobierno argentino ha mantenido en total reserva el contenido de la reunión de hoy, algunos gobernadores han adelantado que debatirán sobre el futuro de YPF, que ha sido acusada por la presidenta Cristina Fernández de una caída de la producción que atribuye a una falta de inversiones. Por su parte, la compañía había anunciado que este año invertirá en Argentina un récord de 15.000 millones de pesos (3.416 millones de dólares), cifra que supera los 13.300 millones de pesos (3.029 millones de dólares) invertidos en 2011.