Pase lo que pase este viernes (12 horas) en Nyon, la Liga de Campeones ofrecerá esta temporada unas semifinales de aúpa. Real Madrid, Barcelona, Bayern de Múnich y Juventus serán los actores de las eliminatorias que decidan qué dos equipos protagonizarán la final de Berlín el próximo 6 de junio. Los cuatro son auténticos pesos pesados del Viejo Continente y entre todos suman la friolera de 21 Copas de Europa. Muchos quilates en juego.

Barcelona, Bayern y Juventus son líderes en sus respectivas ligas domésticas y el Real Madrid es el vigente campeón de la competición. Y si los blancos son los actuales defensores del título, los alemanes fueron los campeones hace dos campañas. Mientras, los culés son los que más Ligas de Campeones han ganado en las últimas diez ediciones, con tres.

Para el Real Madrid se ha hecho habitual alcanzar esta ronda de la competición, ya que será la quinta consecutiva que dispute una semifinal de Champions. Para el Bayern es la cuarta vez seguida. El Barça faltó el año pasado, superado en cuartos por el Atlético de Madrid, que sería subcampeón del torneo. Y la Juventus celebró el miércoles su pase a lo grande después de 12 años de ausencia. Mucho tiempo para un equipo con tantos galones como la 'Vecchia Signora'.

Los dos equipos españoles quieren de todas todas evitar un enfrentamiento y aplazarlo a la final de Berlín. De encontrarse, sería su quinto duelo directo en la máxima competición europea, donde acumulan un balance equilibrado, con dos eliminatorias favorables para cada uno. En la antigua Copa del Europa, el Real Madrid triunfó en las semifinales de la temporada 1959/60 y el Barça se tomó la revancha la siguiente temporada en primera ronda. En la era moderna de la Liga de Campeones, dos enfrentamientos de semifinales decidieron al futuro campeón.

En el curso 2001/02, el equipo entrenado por Vicente del Bosque tomó el Camp Nou (0-2) y confirmó su pase en casa (1-1) antes de superar en la final al Bayer Leverkusen (2-1). Idénticos resultados se dieron en la temporada 2010-11 con aquel duelo de banquillos entre Pep Guardiola y José Mourinho, aunque esta vez fue el Barça quien ganó a domicilio (0-2) y resolvió ante su público (1-1), conquistando posteriormente el título ante el Manchester United (3-1).

Cómo han llegado hasta aquí

El Real Madrid llega a las semifinales tras sufrir en exceso en su camino a las mismas. Contra el Schalke 04 alemán los octavos no tuvieron nada que ver con los de la temporada pasada. Esta vez, el partido de vuelta en el Santiago Bernabéu se convirtió en una pesadilla y a punto estuvo de costarles la eliminación (3-4). Y en cuartos contra el Atlético sólo un gol de Chicharito Hernández en el minuto 88 de la vuelta en el Bernabéu pudo doblegar al rocoso conjunto rojiblanco tras el empate sin goles en el Calderón.

El Barça, por su parte, es el equipo que con más holgura ha logrado su billete a semifinales. El conjunto de Luis Enrique, con todo su engranaje encajado y funcionando como un reloj, le dio en cuartos un absoluto repaso al París Saint-Germain ganándole por 1-3 en la ida y por 2-0 en la vuelta. Antes, también se había deshecho del Manchester City sin tampoco excesivo esfuerzo. Líder de la Liga BBVA y finalista de la Copa, el nuevo proyecto blaugrana va viento en pompa y podría poner la guinda alcanzando la final.

Especialmente morboso sería que el bombo emparejara al equipo azulgrana con el Bayern de Múnich, lo que supondría la vuelta de Pep Guardiola al estadio donde marcó época. Los alemanes han demostrado ser un equipo de múltiples recursos y un martillo pilón cuando las circunstancias lo requieren. En Oporto sufrieron una derrota que parecía apartarles de esta ronda (1-3) pero la exhibición en el Allianz Arena (6-1) les devolvió al lugar que les corresponde. Tampoco andaría carente de emoción y cuitas un emparejamiento con el Real Madrid, que pasó por encima de los bávaros el año pasado en esta misma ronda.

Por último, la Juventus parece colgarse el cartel de rival más asequible. Sin embargo, los italianos han llegado a las semifinales por méritos propios y en los últimos años dominan con puño de hierro la liga italiana. Es verdad que en cuartos han eliminado al Mónaco gracias a un polémico gol de penalti de Vidal en la ida y con 0-0 en la vuelta. Pero los blanquinegros cuentan con jugadores que se las saben todas como Pirlo, Buffon o Tévez, jugadores que se han hecho un nombre entre los mejores del mundo como Vidal y Pogba y jóvenes que están demostrando estar a la altura del nombre y la historia de la Juve, como Morata.

Así pues, las bolas depararán suerte. Los actores están ya elegidos. Solo falta conocer la pareja de baile de cada uno. Los partidos de ida tendrán lugar el 5 y 6 de mayo, mientras que la vuelta se jugará el 12 y el 13 del mismo mes. La final, el 6 de junio en el Estadio Olímpico de Berlín. Ese es el objetivo de los cuatro equipos. Pero solo dos se disputarán la gloria.