Queda en libertad el jefe de la trama de reventa de entradas en el Mundial
Publicidad
La policía brasileña ha dejado este martes en libertad al británico Raymond Whelan, uno de los directores de Match Hospitality, empresa contratista de la FIFA, quien fue detenido la víspera acusado de ser el jefe de una compleja red internacional de revendedores de las entradas VIP para el Mundial 2014.
Publicidad
Whelan fue beneficiado por un hábeas corpus que le permite responder a las acusaciones en libertad, según informó el comisario Fábio Barucke, de la Policía Civil de Río de Janeiro y que lidera la investigación. Tras pagar una fianza y entregar su pasaporte a las autoridades como compromiso de que no abandonará el país, el británico dejó la comisaría de policía en la mañana de este martes y todavía no tiene fecha definida para prestar una nueva declaración.
La compañía Match Hospitality dijo que su director, Ray Whelan, ayudará a la policía con nuevas investigaciones. "Match Hospitality tiene plena fe en que los hechos determinarán que no ha violado ninguna ley. Match Hospitality seguirá apoyando plenamente todas las investigaciones policiales, que creemos firmemente que exonerarán por completo a Ray", dijo la firma en un comunicado.
Whelan fue detenido el lunes en desarrollo de una operación Jules Rimet -por el nombre del primer presidente de la FIFA- realizada por la Policía Civil del estado de Río de Janeiro para identificar al supuesto cabecilla de una organización desmontada la semana pasada con la detención de once personas acusadas de revender por altos precios entradas para el Mundial que la FIFA había destinado a confederaciones, selecciones y empresas.
Publicidad
El británico fue arrestado en el lujoso hotel Copacabana Palace, en el que están alojados los dirigentes de la FIFA durante el Mundial, y conducido a una comisaría en la zona sur de Río de Janeiro. Match Hospitality fue la empresa escogida por la FIFA para ofrecer las entradas del Mundial en paquetes reservados por empresas y para operar las acomodaciones hoteleras para los futbolistas de las diferentes selecciones y los dirigentes del órganismo futbolístico.
Whelan fue identificado como jefe del grupo por un abogado detenido en la operación que aceptó colaborar con las investigaciones a cambio de beneficios en las penas. A los miembros de la organización investigada se les incautaron entradas para el Mundial que pertenecían a dirigentes de diferentes países, confederaciones y empresas que habían comprado paquetes. Tales tickets eran ofrecidos por precios muy superiores a los establecidos por la FIFA, según pudo confirmar la Policía Civil con escuchas telefónicas.
Publicidad
Las entradas eran manejadas por empresario franco-argelino Mahamadou Lamine Fofana, uno de los detenidos la semana pasada y en cuyo teléfono móvil fueron identificadas decenas de llamadas para integrantes de la Match Hospitality. La empresa pagó 240 millones de dólares por derechos exclusivos para vender paquetes corporativos de alojamiento en el Mundial 2010 y el actual. La empresa tiene un contrato con la FIFA hasta el Mundial 2022 en Qatar.
Philippe Blatter, el sobrino del presidente de la FIFA Joseph Blatter, es el presidente de Infront, una compañía que tiene un 5% de participación en Match Hospitality.