Portugal puede agarrarse a los números, pero no a la lógica. Un gol de Liedson de cabeza cuando el partido ya apuntaba a su fin les dio un empate que, en realidad, es casi tan inútil como una derrota. El partido contra Dinamarca estaba marcado en el calendario con cientos de signos de exclamación y colores chillones. Tenían que ganar, sólo valía ganar. No lo consiguieron. Los lusos ven como el Mundial de Suráfrica se escapa, no sólo la clasificación directa, también la oportunidad de un purgatorio en forma de repesca.

Existe una enorme discordancia entre los nombres de Portugal y lo que luego se ve en el campo. Simao, Pepe, Deco, Carvalho, Nani y Cristiano, sobre todo Cristiano, deberían de formar un plantel temible, con un juego cuanto menos efectivo si no vistoso y con vitola de candidato al Mundial. Nada más lejos de la realidad.

El conjunto portugués está deslabazado, sus ideas de fútbol son escasas y la mayoría de jugadores recorren el campo sin ton ni son, incapaces de hilvanar un fútbol digno de las estrellas que componen la plantilla. Un gol de Bendtner, tan sólo en el centro del área como para controlar con el pecho, pensar y rematar, fue el que certificó el poco futuro de los portugueses.

Los lusos están cuartos en el grupo a siete punto de la cabeza que ocupa Dinamarca. Faltan nueve por disputar, por lo que sólo una catástrofe de los escandinavos y la perfección portuguesa puede dar a los de Queiroz el pase directo a Suráfrica. Tampoco es sencilla la empresa para llegar al segundo puesto, el que da acceso a la repesca. Suecia, está a tres puntos y los de Ibrahimovic tienen dos partidos muy sencillos con Malta y Albania como rivales.

Sólo les puede incordiar el encuentro a Dinamarca que ya está prácticamente clasificada. También Hungría está por encima de los lusos, a cuatro puntos. En este caso la opción de sobrepasarles sí está en manos de los portugueses, ya que sus dos próximos partidos serán contra los magiares, el primero de ellos el miércoles en Budapest.

Si la lógica se cumple y Portugal se queda fuera del Mundial Cristiano Ronaldo pierde dos veces. La primera por no poder ir a la gran competición, esa que todos los futbolistas anhelan y que ganarla te da automáticamente la categoría de héroe. El otro punto lesivo para el de Madeira es el de los premios individuales. Cristiano se los toma en serio, los busca y los lucha y sabe a la perfección que sin estar en el Mundial puede olvidarse de los del año que viene.

Los de Domenech tampoco tuvieron una buena tarde. Tenían una buena oportunidad para presionar a Serbia que lidera su grupo de clasificación, pero la malgastaron empatando en casa con Rumanía. El gol de Henry de poco sirvió a los galos que, a pesar de todo, tendrán oportunidades para atacar el liderato de los balcánicos. El próximo miércoles ambos equipos se verán las caras en Belgrado, si ganan los locales por más de un gol podrán comprar ya los billetes para Suráfrica, si gana Francia les arrebatará el liderato.