Sebastien Loeb (Citroen) no pudo poner un mejor colofón a su exitosa carrera deportiva. En el Rally de Francia y ante sus paisanos se hizo con la victoria, lo que le permitió conquistar de forma matemática el Mundial de rallies, ni más ni menos que el noveno en su cuenta particular.

Loeb, con el triunfo prácticamente decidido desde el inicio de la jornada, dedicó el día a completar los tramos sin mayores riesgos ni sobresaltos, asegurando la mecánica para poder celebrar su novena corona, todas consecutivas, junto a sus paisanos. Y es que la última especial se disputó en Haguenau, la localidad en la que nació. En segundo lugar quedó el finlandés Jari-Matti Latvala (Ford), mientras que el compañero de equipo de Loeb, el también finés Mikko Hirvonen, fue tercero y Citroen logró el título de constructores.

Loeb tuvo el final deseado. Pudo celebrar su noveno campeonato del mundo junto a sus paisanos, un título que tendrá un sabor especial porque puede ser el último que consiga, al menos en el mundial de rallys. Ya ha anunciado que el próximo año disputará sólo algunas pruebas. Ya tiene su vista puesta en el mundial de turismos y podría dar el salto junto con Citroen en 2014.

El piloto galo dedicó el día a cumplir con el programa sin asumir riesgos. Permitió que Latvala se le acercara hasta los quince segundos y ni siquiera buscó el mejor tiempo en la Power Stage, que en esta ocasión fue el antepenúltimo tramo, y no el último como es habitual. Los tres puntos por el mejor tiempo fueron para el estonio Ott Tanak (Ford).

Hoy quiso finalizar el día sin sobresaltos. Ya había corrido mucho el viernes y el sábado, hasta que dejó a Latvala a una distancia prudencial para dejar de arriesgar. Además, el finlandés también se había mostrado satisfecho con su segundo lugar. El tercer puesto fue para Hirvonen, segundo del mundial y único piloto con opciones de retrasar el éxito de Loeb. Su objetivo desde el inicio de temporada era el de ayudar a Citroen a ganar el campeonato de constructores, y así lo hizo.

Por detrás, Neuville fue el vencedor de la batalla que centraba la atención hoy, ya que los puestos del podio estaban marcados. El belga se impuso en la batalla por el cuarto puesto, tras superar al noruego Mads Otsberg (Ford). El español Dani Sordo, que partía hoy quinto, tuvo que abandonar tras el tercer tramo cuando se le rompió la dirección asistida del Mini. Intentó salir al cuarto, pero desde el equipo se lo impidieron por motivos de seguridad.

Con estos resultados, Loeb suma su 75º triunfo en el Mundial, en 162 participaciones, mientras que Citroen consigue su octavo título. La próxima cita del Mundial será en Italia, sobre asfalto, entre los días 18 y 21 de octubre.