Una dilatación de la aorta retira a Sergio Sánchez

Algo no marcha bien en el corazón de Sergio Sánchez. Una dilatación de la arteria aorta obliga al jugador del Sevilla (Mataró, 1986) a dejar el fútbol por un periodo de tiempo no especificado, que podría ser de un año o incluso más largo, hasta que se determine con exactitud cuál es la extensión de la alteración.

El Sevilla emitió ayer un comunicado en el que confirma que los resultados de las últimas pruebas de corazón realizadas al catalán aconsejan la paralización total de su actividad física hasta que no haya una exploración más profunda. El lateral se encuentra en Barcelona con su familia a la espera de ser sometido a más exámenes que confirmen el diagnóstico inicial.

El Espanyol le diagnosticó hace años esta dolencia, de tipo hereditario

El riesgo asumible en este tipo de casos vistos los precedentes es cero. Después de la trágica muerte por arritmia de Antonio Puerta, los jugadores del Sevilla son sometidos a exámenes periódicos en los que se intenta detectar la más mínima anomalía cardiaca. La revisión de Sergio ha obligado a esta determinación tan drástica. Es la misma política que se ha decidido emprender en el caso del jugador del Real Madrid Rubén de la Red. Ayer, Palop, capitán del Sevilla, reconoció tras conocerse la noticia que "el vestuario está tocado".

La principal diferencia con casos como el de Puerta o De la Red radica en que Sergio Sánchez no ha sufrido ningún episodio que pudiese hacer sospechar que sufriera algún tipo de problema. De hecho, el lateral no padece ningún trastorno arrítmico (alteración en el ritmo de los latidos) al contrario que los dos casos mencionados. En las últimas semanas Sergio Sánchez aparecía y desaparecía de las convocatorias de Jiménez. Una gripe repentina le obligó a dejar la expedición que viajó a Canarias para enfrentarse al Tenerife. Volvió al once inicial el fin de semana siguiente ante el Valladolid para causar baja de nuevo ante el Sporting siete días después. Terminó el año como titular en la derrota ante el Getafe, en el Pizjuán.

El lateral llegó al Sevilla el pasado verano procedente del Espanyol, el club donde se formó. Sergio Sánchez ya fue diagnosticado hace años en el club blanquiazul de dilatación aórtica congénita y estaba sometido a seguimientos cardiológicos periódicos. El crecimiento de su dilatación aórtica es lo que ha obligado a los médicos sevillistas a dictar su separación del equipo sine die.

A las pocas semanas de incorporarse al Sevilla, Sergio Sánchez sufrió el golpe de la muerte súbita de su ex compañero en el club blanquiazul Dani Jarque. Compañeros de vestuario durante años, Sergio se mostró muy dolido por la muerte de su amigo. No le gustaba hablar de ello en las entrevistas. Respecto a su propio problema, fuentes próximas al jugador confirman que ya se encuentra más animado. Hace unos días estaba deshecho.