"Debían haber ido en avión"

"Las normas son muy claras: se exige a los equipos que viajaran en avión a Angola; en ningún caso debían viajar en autocar". La declaración de Souleymane Habuba, portavoz de la Confederación Africana de Fútbol, desvela que la selección de Togo actuó con temeridad al decidir llegar a Cabinda en autocar. Y saltándose las instrucciones. La Federación afectada no ha dado aún explicaciones al respecto.

Los futbolistas de Togo reconocen que están vivos gracias a los dos coches que escoltaban a su autocar. "Nos salvaron la vida a todos" declaró el centrocampista Salifou en la página web del Aston Villa. "Entre los dos coches llevábamos unos 10 agentes. Repelieron los ataques con fuego. El ataque duró media hora. Oí las balas silbando al lado mío. Era como estar en una película".

El ataque ocurrió a las 15.15 horas del viernes. El autocar ya estaba en territorio angoleño, en el conflictivo enclave de Cabinda, región productora de petróleo y con grupos que reclaman la secesión.

"Yo creo que habían transcurrido unos 15 minutos desde que pasamos la frontera", añade Salifou. "En ese momento abrieron fuego, un fuego indiscriminado contra nosotros. Mataron al conductor; es decir, nos quedamos detenidos en medio de la carretera, sin poder avanzar. Yo iba en la última fila. A mi lado estaba Adebayor. Delante, Akapko, que recibió dos disparos en la espalda. Y mi amigo Obilalé también recibió dos balazos".

Los jugadores describen las escenas posteriores con tintes trágicos. Todos lloraban. Por el pasillo corría un reguero de sangre. "Fue horrible y tardaremos mucho tiempo en poder dormir", resume Adebayor.