Forzada por su gris comienzo, Rusia está obligada a vencer a Argelia en Curitiba (22.00 horas, Gol T) para pasar a unos octavos de final que son el objetivo mínimo del país que acogerá el próximo Mundial. Tras doce años de ausencia en un Mundial, el hecho de conseguir superar la fase de clasificación europea para la cita de Brasil por delante de la selección portuguesa de Cristiano Ronaldo provocó que el equipo de Capello despertase enormes expectativas en su afición.

Hasta un 25% de los rusos creía que su país podría alzarse con el título el próximo 13 de julio en Maracaná. Sin embargo, la realidad a día de hoy del combinado de Fabio Capello es bien distinta y los rusos necesitan una victoria ante la escuadra africana si no quieren marcharse de vuelta a casa a las primeras de cambio. Un empate en sus dos partidos en suelo carioca han provocado un alud de críticas contra el técnico italiano, al que se le recrimina que no utilice a Alan Dzagoev ni al exsevillista Alexander Kerzhakov.

Al primero, un proyecto de estrella que no acaba de despegar, tan sólo le dio media hora de juego contra los coreanos y siete minutos en el Maracaná frente a Bélgica. El segundo, el máximo goleador histórico de la selección (26 tantos), sigue siendo un revulsivo de última hora. El equipo de Capello necesita el gol, porque con un punto en tres partidos no le sirve más que una victoria. Hasta el momento el técnico ha recurrido a la mala suerte -el error del meta Igor Akinfeev ante Corea y el tanto encajado en los minutos finales frente a Bélgica- para justificar el pobre bagaje de su equipo. Ahora ya no tiene más margen de error.

Enfrente tendrá a Argelia, un conjunto eufórico tras lograr su primera victoria en un Mundial desde 1982. Su 4-2 a Corea, además, le ha convertido en la selección africana que más tantos ha marcado en un partido mundialista. El equipo magrebí, que se mueve al ritmo del valencianista Sofiane Feighouli, ha mostrado al mundo a Islam Slimani, un atacante del Sporting de Lisboa, de 26 años, que tras ser suplente ante Bélgica revolucionó el juego de los 'fenecos' en el segundo partido, en el que marcó un gol y dio dos asistencias. Slimani, elegido el mejor jugador argelino de 2013, acumula ya 11 goles en 23 apariciones con su selección y comienza a ser objeto de deseo de numerosos clubes.

A Argelia le podría bastar el empate, pero su técnico bosnio, Vahid Halihodzic, ha demostrado ser poco conservador y quiere redondear su participación en la fase de grupos con una victoria ante el próximo anfitrión mundialista. Su juego ofensivo, que a punto estuvo de sorprender a Bélgica en la primera jornada, puede llevar a los octavos de final por primera vez en su historia a la escuadra argelina.

Argelia: Rais Mbolhi; Aissa Mandi, Madjid Bouguerra, Rafik Halliche, Djamel Mesbah; Carl Medjani, Nabil Bentaleb; Sofiane Feghouli, Yacine Brahimi, Abdelmoumene Djabou; e Islam Slimani. Seleccionador: Vahid Halihodzic

Rusia: Akinfeev; Eschenko, Berezutskiy, Ignashevich, Kombarov; Glushakov, Fayzulin; Samedov, Kanunnikov, Shatov; y Kokorin o Kerzhakov. Seleccionador: Fabio Capello

Árbitro: Cuneyt Cakir, de Turquía

Estadio: Arena da Baixada, de Curitiba, con capacidad para 38533 espectadores.