Abidal gana su primer partido
Al jugador le ha extirpado completamente el tumor y no se ha producido ninguna complicación durante la intervención
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Después de casi tres horas en el quirófano, el doctor Josep Fuster Obregón y su equipo lograron extirpar ayer completamente y "sin incidencias" el tumor hepático detectado hace unos días a Eric Abidal, futbolista del Barcelona. El francés fue intervenido por vía laparoscópica poco invasiva y, por tanto, de más rápida recuperación en el centro privado del hospital Clínic. Y "por expreso deseo del jugador", según rezaba el comunicado médico emitido desde el club, no se facilitarán más datos ni de la operación ni del estado físico del zaguero. "En función de su evolución, podría recibir el alta hospitalaria en el plazo aproximado de una semana", concluía la nota.
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Abidal ingresó ayer en el hospital a primera hora de la mañana y entró en quirófano hacia las cuatro de la tarde. En la mesa de operaciones, Fuster se encontró con un tumor pequeño y encapsulado. Desde anoche, el francés se recupera en una habitación de la séptima planta, escalera 4, del centro médico donde, en su día, también fue operado el rey Juan Carlos. En principio, el lateral no volverá a calzarse las botas esta temporada.
El escueto comunicado del club no indica plazo alguno para conocer los resultados de la biopsia del tumor, que se podría haber efectuado antes de la intervención a través de una punción. Al ver que la tuberosidad podía tener mal pronóstico, se habría optado por la rápida extirpación quirúrgica.
Los galenos del Barcelona advirtieron que Abidal podía tener un tumor en el hígado al comprobar en unos análisis de sangre que los marcadores de una proteína salían alterados. El exhaustivo control al que someten los doctores al francés, que sufre pequeños problemas en los riñones, facilitó su detección.
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De hecho, el futbolista pretendía someterse a esos exámenes médicos regulares a su regreso de la concentración con Francia, la próxima semana, pero, apremiado desde el club, los pasó hace unos días.
Ayer, un día después de hacerse pública su dolencia, se repetían las muestras de cariño hacia el jugador. "Abi va a salir adelante, es un tipo muy fuerte físicamente", apuntó Víctor Valdés. "Sería importante poder dedicarle la victoria frente al Getafe, aunque la más trascendente es la que él ganará", insistió el portero. "Estamos convencidos de que superará esta enfermedad; es una de las personas más positivas del vestuario. Saldrá adelante", abundó.
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También Luis Enrique quiso mostrar su apoyo al francés: "A él, su familia, el club y la hinchada del Barça. Como ocurre con Miki Roqué, esta es una situación complicada. Pero seguro que la van a solventar. Esperamos verles pronto disfrutando de la vida y del fútbol". El asturiano añadió que el gesto de los jugadores del Madrid, que mostraron una camiseta con el lema "Ánimo Abidal" tras el partido del miércoles, le pareció "maravilloso".