La flamante Terminal 1 del aeropuerto de El Prat dio ayer la bienvenida a la ciudad condal al fichaje estrella del Barcelona de la recién estrenada temporada. Ataviado con vaqueros, camisa blanca, jersey gris y gafas de sol, Zlatan Ibrahimovic paseó apresuradamente sus 193 centímetros de altura por los claros pasillos minimalistas de la obra del arquitecto Ricardo Bofill.

No había tiempo que perder. En las oficinas del club catalán, le esperaban decenas de cámaras para inmortalizar su imagen al lado del escudo que lucirá los próximos cinco años en su nueva camiseta. El sueco, que no dejo de sonreír en todo momento, saludó afectuosamente al director de Fútbol del club, Raúl Sanllehí, con quien después compartiría mesa. El delantero cenó con el presidente, Joan Laporta; el vicepresidente deportivo, Rafael Yuste; el secretario técnico, Txiki Begiristain, y el propio Sanllehí.

El sueco no se anduvo con chiquitas y en su primera declaración a los medios del club se mostró ambicioso: “Quiero formar parte de la historia del Barça”, sentenció, mientras no paraba de repetir: “Estoy muy contento”. “Cuando todo esté firmado seré el hombre más feliz del mundo”, concluyó el delantero.

El sueco afirma sentirse como 'el hombre más feliz del mundo'

Antes de abandonar Inglaterra, Pep Guardiola hizo sus primeras valoraciones al fichaje del ariete: “Es un jugador fantástico, de mucho nivel”, celebró el técnico. “Hace muchas cosas, es muy potente”, detalló el preparador no sin antes agradecer al club “el esfuerzo por fichar a un jugador tan importante”.

Y es que el delantero del Inter se convertirá hoy en el fichaje más caro de la historia de la entidad azulgrana. El Barcelona desembolsará por el sueco unos 46 millones de euros en una operación que incluye el traspaso de Samuel Etoo, que hoy mismo debe de pasar revisión médica en Milán, y la cesión –con una opción de compra a final de temporada– de Alexander Hleb, a quien el Barça seguirá pagando gran parte de la ficha –un 70%–.

La jornada de hoy empezará temprano para Ibrahimovic. A primera hora, pasará el pertinente reconocimiento médico en las instalaciones del Camp Nou y en el Hospital de Barcelona. Superado lo que debe de ser un trámite y ya a mediodía, el sueco volverá a las oficinas de la entidad para firmar el contrato que le unirá al club azulgrana hasta 2014.

Si todo va sobre lo previsto, el delantero será presentado ante los medios de comunicación hacia las 18.30 horas. Será en un acto solemne, en la sala París, para luego pisar el césped recién plantado del Camp Nou –se levantó antes de los conciertos de U2 del mes pasado– vestido de corto para la sesión fotográfica del acto.

Como ya sucediera con la presentación de otros cracks como Ronaldinho (25.000 espectadores) o Henry (32.000), el Barça abrirá las puertas del estadio –hacia las 17. 30 horas– a todos sus aficionados.