El cerdo agridulce es seguramente, junto al arroz tres delicias y los rollitos de primavera, una de las recetas de los restaurantes chinos más conocidas. Trozos gruesos o en tiras de cerdo, rebozados y fritos, y acompañados de una exótica salsa que parte de combinar el tomate concentrado o el kétchup con el vinagre de arroz y la soja.

A veces también lleva piña para darle un punto más afrutado. Una mezcla a priori poco sugerente, pero que consiguió cautivar el corazón de muchos de los comensales occidentales cuando probaron por primera vez la comida china.

Combina bien con el arroz blanco o tres delicias y a veces se sirve con vegetales (principalmente pimientos, cebolla o piña). En Asia aplican una doble fritura al rebozado para que salga más crujiente (primero lo fríen a temperatura media, hasta que se hace el cerdo por dentro, y después le forman la costra al freírlo de nuevo pero a temperatura alta). La receta no es complicada aunque requiere de seguir bien los pasos y de acertar con la fritura.

Receta de cerdo agridulce

Ingredientes 4 personas:

• 400 gr. de aguja de cerdo o cuello (que tenga un poco de grasa).

• 1 cebolla.

• 3 dientes de ajo.

• Salsa de soja.

• 1 trocito de jengibre rallado.

• 1 huevo.

• Vinagre de arroz.

• Harina de trigo y maicena.

• Azúcar.

• Tomate concentrado o kétchup.

• Jugo de piña.

• Unos trozos de piña fresca (opcional).

• Pimientos de colores o verde y rojo.

• Pimienta blanca.

• Agua.

• Aceite de oliva.

1. Haz el adobo para el cerdo:

Corta la carne de cerdo en dados o tiras gruesas y ponlo en un bol. Agrega varias cucharadas de salsa de soja, una cucharadita de sal, y media cucharadita de pimienta blanca. Ralla con un rallador fino un trocito de jengibre pelado, un diente de ajo y media cebolla. Agrégalo a la carne junto a un huevo cascado. Remueve muy bien hasta que se integren los elementos. Tápalo con papel film y déjalo reposando en la nevera durante al menos media hora.

2. Reboza el cerdo:

Mezcla harina de trigo con maicena (mitad y mitad) y reboza los trozos que tenías en adobo. Fríelos en abundante aceite, al principio a temperatura media, hasta que se haga el cerdo por dentro (alrededor de cinco o seis minutos, dependiendo del tamaño). Retíralos del aceite, sube el calor (sin que legue a humear), y vuelve a freír los trozos de cerdo solo hasta que se doren. Ponlos después sobre papel absorbente para que suelten parte de su grasa.

3. Haz la salsa agridulce:

Lava y corta en dados gruesos media cebolla y parte de los pimientos. Saltéalos a fuego fuerte con un chorrito de aceite en la sartén hasta que estén medio hechos (que salgan cruditos). Retíralos y reserva. En la misma sartén fríe dos dientes de ajo bien picados. Añade una cucharada de pasta de tomate concentrado. Remueve y cocínala durante un minuto. Agrega un vaso de vinagre, cuatro cucharadas de azúcar, varias cucharadas de salsa de soja, dos cucharadas soperas de zumo de piña y varios trozos de piña fresca. Echa después un vaso de agua con una cucharadita de maicena bien diluida. Cocínalo hasta que se reduzca la salsa y esté muy espesa. Por último, introduce los pimientos y la cebolla que habías salteado y los trozos de carne. Mézclalo hasta que la salsa esté bien repartida.

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