Icíar Bollaín comienza el rodaje de su nueva película 'Soy Nevenka'

La exconcejala de Hacienda del PP de Ponferrada entre el año 1999 y 2000 y economista española Nevenka Fernández fue la primera mujer española en lograr la condena de un cargo político. Se trataba del entonces alcalde de Ponferrada, Ismael Álvarez, a quien denunció por acoso sexual, lo que se convirtió en un escándalo que sacudió España.

Icíar Bollaín, directora de Te doy mis ojos, El Sur o Maixabel, ha definido a la expolítica como "una pionera" del movimiento feminista actual. "Lo hizo cuando la palabra acoso no estaba en la calle. Lo hizo por justicia y supervivencia. Lo hizo muy sola y fue todo muy público", explicó la cineasta a Movistar+ acerca de su nuevo proyecto.

Así, la autora se propone contar la historia de Nevenka, con un guion realizado por Isa Campo, en una película cuyo casting aún no ha sido desvelado y que se estrenará en la pantalla grande para después pasar a la plataforma Movistar+. 

Bollaín quiere recuperar el hito histórico judicial que tuvo que vivir Nevenka, pero también pone el énfasis en el acoso social al que tuvo que hacer frente en la España de hace 20 años, cuando el movimiento #MeToo aún no había comenzado y las mujeres que denunciaban por acoso sexual eran también condenadas socialmente.

De esta forma, Bollaín añade que Nevenka "ganó en los tribunales pero se quedó muy sola porque hubo un rechazo social. El abuso fue muy público y todos miraron para otro lado. También es un retrato de los medios, la tacharon de trepa. Revisando imágenes hemos visto como [el director de informativos de TVE] Urdaci, cuando dio la noticia, la definió como una disputa sentimental en Ponferrada, y también queremos contar esto".

El rodaje comenzará en marzo y se desarrollará en el municipio de Zamora, donde la directora y su equipo estuvieron la semana pasada buscando algunas de las localizaciones en las que se desarrollará, como el Ayuntamiento y la subdelegación del Gobierno. Tampoco descartan, según adelanta el medio Bierzodiario, que alguna escena pueda ser rodada en Ponferrada, ciudad en la que ocurrió todo y que Bollaín visitó el año pasado, pero afirmó no haber encontrado la acogida ni el apoyo que esperaban para la producción.