La Asociación Cinematográfica de Estados Unidos (MPAA por sus siglas en inglés) ha otorgado la calificación 'R' a la última película del director estadounidense Ira Sachs, Love is Strange (El Amor es Extraño), un drama que narra los problemas a los que se enfrenta una pareja homosexual de avanzada edad en Nueva York después de que en 2011 se legalizara el matrimonio entre personas del mismo sexo.

El distintivo 'R' (Restringido) no recomienda el visionado de la película a menores de 17 años sin el acompañamiento de un padre o tutor legal al poder contener escenas de violencia explícita, desnudos o sexo. La decisión, tan extraña como el amor, ha sorprendido a gran parte de la crítica estadounidense, que considera que la calificación encierra tintes homófobos, ya que el film protagonizado por John Lithgow y Alfred Molina no contiene ninguna escena digna de censura.

Muchos críticos cinematográficos estadounidenses han destacado que la película ha recibido la misma calificación que la nueva entrega de Sin City, con escenas de alto contenido sexual y violento y que aborda con ligereza el tema de las drogas. Sin embargo, denuncia la crítica, Love is Strange tan solo muestra dos escenas de los protagonistas durmiendo juntos y completamente vestidos.

El último trabajo de Sachs aborda desde una perspectiva realista los problemas a los que se enfrentan los matrimonios homosexuales mayores a través de la historia de Ben y George, que llevan 39 años juntos, que deciden casarse después de 39 años de relación. Todo se complica cuando George es despedido sin un motivo aparente del colegio católico en el que llevaba trabajando años, al mismo tiempo que pierden la casa en la que viven, una situación que les obliga a separarse para vivir en casa de amigos y conocidos.

Normalmente se califica con una 'R' a las películas de los géneros de acción o terror, aunque este drama no es más que un 'delicado retrato de una larga relación, amorosa puesta a prueba', según la crítica de The New York Times. 'Inocente', 'tierna' o 'adulta' han sido otros de los calificativos de los expertos, aunque para la MPAA, la película contiene escenas sobre las que los padres han de decidir si quieren que sus hijos las vean.