Este artículo se publicó hace 16 años.
"El sexo no existe para reproducirnos, hay formas más sencillas"
El biólogo Ambrosio García Leal se ha centrado en el estudio de la sexualidad en seres humanos y animales
Nacido hace 50 años en Barbate (Cádiz), Ambrosio García Leal se ha convertido en uno de los biólogos más conocidos de España después de publicar dos libros acerca de un tema que muchos compañeros suyos consideran frívolo, pero que él cree que es fundamental: el sexo. El segundo de ellos, El sexo de las lagartijas (Tusquets), es un ensayo que explora la teoría de la evolución a partir del sexo en los animales.
¿Cómo surgió la idea de escribir sobre sexo?
Elegí este tema porque le interesa a todo el mundo, no nos engañemos. Además, en conversaciones con amigos yo tenía una serie de ideas que quería desarrollar y me convencieron para ponerlas por escrito. No fue algo demasiado meditado, empecé a darle vueltas a la cuestión y al final se convirtió en una tesis doctoral.
Una tesis doctoral que salió de una conversación entre amigos...
Pues sí. Para que veas lo que puede dar de sí una conversación. El sexo de las lagartijas contiene lo que no quise detallar en La conjura de los machos, porque este ya estaba cargado de ideas. En el anterior me he centrado en la sexualidad humana y para este he dejado cuestiones más biológicas.
Tras escribir el ensayo, ¿ha llegado a la conclusión de por qué existe el sexo, si es el método más complicado para reproducirse?
Desde luego, una conclusión es que no existe para reproducirnos, porque hay otras maneras más sencillas que no implican el sexo, como la partenogénesis (generación de individuos a partir de células sexuales no fecundadas). Entonces, ¿por qué en el caso de las especies más complejas es la única forma de reproducción? Las lagartijas a las que hago referencia en el título son poblaciones de hembras partenogenéticas que en un momento prescindieron de los machos. ¿Por qué esto no ha ocurrido más a menudo? Porque el sexo es necesario para proporcionar una adaptabilidad suplementaria, recombina las mutaciones de los genes.
¿Cuál es el principal problema del sexo?
Para los individuos como tales, reproducirse sexualmente sería menos ventajoso que hacerlo asexualmente si no fuera porque no tienes ninguna garantía de que el entorno futuro sea aquel al que tú estás óptimamente adaptado. La utilización del sexo no es reducible a una utilización individual. Tiene que tratarse en términos genéticos y generacionales.
La reproducción asexual se basa en clones...
Exacto, no hay variación genética. La principal desventaja es la falta de adaptabilidad ante la incertidumbre del entorno, de cambios bruscos que se puedan producir en el medio. Por ello, si ocurre un cambio climático fuerte o una enfermedad capaz de matar a uno, caen todos. En cambio, si tienes una variación suplementaria, como las que produce la reproducción sexual, hay posibilidad de que uno sobreviva.
¿El ser humano lo tiene más dificil para reproducirse que otras especies?
Las hembras en general no tienen problemas. Y en el caso masculino, nuestra especie es de las que lo tienen mejor para encontrar pareja. De hecho, la mayoría de machos de la mayoría de las especies muere sin saber lo que es el sexo. No tienen acceso a las hembras porque en la mayoría de las especies hay una competencia feroz por ellas. Esto en las especies monógamas no ocurre tanto. Paradójicamente, para los machos la monogamia supone algo “ventajoso”, pero para las hembras no porque pierden la posibilidad de acceder libremente a los mejores genes.
¿Los animales tienen sexo sin fines reproductivos?
Pues sí. Al menos en el caso de algunas especies, como los bonobos, una monos parecidos a los chimpancés. Tienen una sexualidad social que implica contactos homosexuales o con individuos inmaduros. Pero estos contactos no son relaciones tal como nosotros las entendemos, sino que constituyen un lenguaje no verbal.
¿Existe el orgasmo femenino en las especies animales?
Podría ser, pero es algo difícil de demostrar. El principal inconveniente para que haya orgasmo femenino en estas especies es que el acto sexual dura tan sólo unos segundos. Yo diría, simplemente, que a las hembras no les da tiempo. En nuestra especie existe porque el coito se ha prolongado.
¿Por qué existe en humanos, si no es vital para reproducirse?
En un momento dado, la selección natural ha favorecido a los eyaculadores retardados frente a los precoces y creo que esto está asociado al orgasmo femenino. Creo que tiene una función relacionada con un efecto de succión para seleccionar el esperma de entre varios amantes, dando ventaja al que hace llegar a la hembra al orgasmo.
¿Piensas seguir tratando este tema en el futuro?
No. Mi trabajo en el sexo está concluido. Ahora me voy a pasar al tema de la evolución de la complejidad, la inteligencia.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.