Este artículo se publicó hace 13 años.
Cinco centrales no cumplen los requisitos frente a seísmos
El informe preliminar del CSN sobre las pruebas de resistencia de las plantas atómicas señala que los propietarios tienen que "reforzar las estructuras y componentes" ante los terremotos. Vandellós es la única q
Los responsables de las centrales atómicas españolas tienen mucho trabajo por delante para adecuar sus instalaciones a las nuevas exigencias que impone la seguridad nuclear después de Fukushima. Las empresas propietarias de las seis centrales españolas operativas deberán realizar importantes inversiones para "reforzar las estructuras y componentes" más débiles frente a los terremotos. Salvo Vandellós, todas las demás plantas (Almaraz, Ascó, Cofrentes, Garoña y Trillo) están por debajo del nivel de fortaleza que exigen las pruebas de resistencia que puso en marcha el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) tras el desastre de la central japonesa.
Ayer, el Consejo publicó el resultado preliminar de estos stress-tests, el nuevo examen de selectividad que tienen que aprobar las centrales para poder seguir en marcha, y su escrito muestra que todavía queda mucho por hacer. Para empezar, después de lo vivido en Fukushima y el inesperado poder destructivo del terremoto en Lorca, el nuevo margen de resistencia a los seísmos ha dejado a cinco centrales en fuera de juego. Sobre todo, los dos reactores de Ascó y el de Garoña, que en la actualidad son capaces de hacer frente a terremotos con una aceleración de 0,16g y 0,17g (g equivale a la gravedad terrestre), cuando la exigencia actual es casi el doble: 0,3g. Las centrales deben asegurar que ningún elemento crítico de su funcionamiento se pondrá en entredicho en terremotos con ese valor, que mide la velocidad con la que se mueve la tierra bajo nuestros pies. En Lorca se llegó a una aceleración de 0,36g.
Se deberá fortalecer los equipos previstos ante un apagón
Sin embargo, sólo Vandellós asegura a día de hoy al CSN que un temblor inesperado no proporcionará un susto a las gentes que habitan en su entorno. Las demás están obligadas a acometer obras en sus instalaciones para apuntalar todos sus puntos sensibles. Además, el CSN recoge en su informe que las seis centrales tendrán que fortalecer frente a seísmos "los equipos previstos para hacer frente a una pérdida completa de alimentación eléctrica". Esto es, asegurarse de que el plan de emergencia ante un desastre resista.
La directora de Seguridad Nuclear del CSN, Isabel Mellado, aseguró ayer que en "la mayoría de los casos" los titulares de las centrales sólo deben fortalecer o cambiar estructuras y elementos de las instalaciones. "No hay ninguna central que no pueda cumplir con el objetivo marcado", concluyó. Mellado admitió que había sensibles diferencias entre el trabajo realizado por cada una de las centrales para estas pruebas de resistencia, pero no quiso identificar cuáles: "Unas han respondido mejor que otras".
La lectura de las 102 páginas del informe revela que el CSN es más duro con la central de Santa María de Garoña que con el resto de las plantas. El regulador observa problemas concretos o falta de información en casi todos los puntos analizados (consecuencias de los terremotos, inundaciones, fenómenos naturales extremos, medidas de gestión de accidentes severos en el reactor), considera sólo "aceptables" las medidas tomadas en otros (como la pérdida total de energía) y se propone "revisar" determinadas informaciones.
"No hay ninguna central que no pueda cumplir", asegura el CSN
El documento del CSN hace un repaso de cada una de las amenazas a las que deberían hacer frente las plantas atómicas españolas, pero no analiza cuál sería la situación en el caso de sumarse varios de estos imprevistos. En la catástrofe de Fukushima, un terremoto precedió a un tsunami que provocó que la central se quedara aislada y sin electricidad. Esta circunstancia ha dejado claro que las centrales deben estar listas para resolver varias de estas contingencias a la vez.
El informe plantea una pega importante a las centrales atómicas: la necesidad de mejorar las instalaciones para que la presión y las emanaciones de hidrógeno no se conviertan en un problema en caso de accidente, como sucedió en la central nipona, donde la acumulación de gas provocó varias explosiones. Además, exige que se establezcan mecanismos para asegurar que el venteo de estos gases no suponga la expulsión de materiales radiactivos.
Datos de la industriaEl informe es especialmente duro con Santa María de Garoña
La directora de Seguridad Nuclear reconoció que en este informe preliminar, que debe ser completado por el CSN antes del 31 de octubre, determinados análisis se han realizado contando únicamente con los datos proporcionados por las empresas. "Ahora nos toca a nosotros llevar el análisis hasta donde no llega el de los titulares", aseguró. Uno de estos aspectos es el de la protección frente a inundaciones: "Sus informes aseguran que están convenientemente preparados. Y yo en principio no tengo por qué dudar de su palabra", defendió.
El portavoz de energía nuclear de Ecologistas en Acción, Francisco Castejón, criticó que en casos como este no se diga explícitamente que los datos son de las propias empresas: "El aprobado se lo dan las propias centrales a sí mismas. No se puede decir si han aprobado, porque aún no lo sabemos". Para el físico nuclear del CIEMAT, el informe flaquea desde el propio planteamiento, ya que "son muy poco exigentes con las pruebas". Castejón critica que el CSN no reclama los nuevos parámetros requeridos por el Organismo Internacional para la Energía Atómica en caso de terremoto, como el propio organismo reconoce en su documento.
Por su parte, la industria nuclear española se felicitó por el resultado del informe, que a su entender muestra que las instalaciones "están sólidamente preparadas". Una portavoz del Foro Nuclear, representante de la industria, señaló que compañías como Endesa o Iberdrola "no van a escatimar inversión económica alguna" a la hora de realizar las reformas exigidas por el CSN para poner a punto sus centrales.
Debilidades de las plantas operativas, según el CSNTrillo (Guadalajara)
Propiedad:Iberdrola (48%)
Autorización hasta: 15/11/2014
Saturación de piscinas: 20431
Número de reactores: 1
El titular de la central no ha incluido el análisis de incendios potenciales ni sucesos naturales “creíbles” como tormentas eléctricas.Debe detallar los medios disponibles para estimar la cantidad de material radiactivo emitido al exterior en caso de liberación, y la potencial acumulación de hidrógeno.
Vandellós II (Tarragona)
Propiedad: Endesa-Iberdrola
Autorización hasta: 27/07/2020
Saturación de piscinas: 2020
Número de reactores: 1
La central deberá incluir medidas adicionales de protección frente a inundaciones.
Vandellós II tendrá que analizar la posibilidad de un incendio externo.
La planta deberá completar su informe sobre los medios de protección y control dosimétrico de sus trabajadores
Cofrentes (Valencia)
Propiedad: Iberdrola
Autorización hasta: 20/03/2021
Saturación de piscinas: 2021
Número de reactores: 1
El CSN cree que la central debe analizar los riesgos internos derivados de seísmos, como inundaciones o incendios.
Como Trillo, Cofrentes tendrá que desarrollar los medios disponibles para estimar la cantidad de material radiactivo emitido al exterior en caso de liberación para proteger la contención.
Ascó (Tarragona)
Propiedad: Endesa-Iberdrola
Autorización hasta: 01/10/2011
Saturación de piscinas: 2012 y 2013
Número de reactores:2
El CSN está comprobando las pruebas de la central sobre la resistencia sísmica de las presas de Mequinenza y Ribarroja.
Ascó deberá incluir procedimientos contra inundación por “precipitación local intensa”.
La planta tendrá que aportar más datos sobre las medidas de gestión de accidentes severos en el reactor.
Almaraz (Cáceres)
Propiedad:Endesa–Iberdrola-UF
Autorización hasta: 08/06/2020
Saturación de piscinas: 2021 y 2022
Número de reactores: 2
El CSN asegura que va a comprobar la integridad de la presa de Valdecañas en caso de terremoto.
El regulador ve “confusión” en algunos datos sobre la posibilidad de inundaciones.
Almaraz tampoco ha considerado sucesos extremos como nieve, caída de rayos, altas temperaturas, sequía o heladas.
Garoña (Burgos)
Propiedad: Nuclenor
Autorización hasta: 06/07/2013
Saturación de piscinas: 2015
Número de reactores: 1
La central de Santa María de Garoña debe mejorar su información sobre cómo afrontaría las inundaciones, incluidas las provocadas por la rotura de una presa. El titular debe mejorar sus previsiones por una posible pérdida de energía eléctrica. Tendrá que completar su informe sobre el control dosimétrico de sus trabajadores.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.