Es probable que hayas oído hablar de la leche dorada, una de las bebidas que más presencia tienen por internet y donde abundan sus métodos de preparación y fotos en redes sociales. Pero puede que no tengas muy claro de qué se trata exactamente o por qué motivo parece tener tantos adeptos.
Y es que más allá de su bonito aspecto, la leche dorada se ha convertido en la bebida de moda por otras razones. Te explicamos cuáles son por si te animas a probarla o a prepararla.
¿Qué es la leche dorada?
La leche dorada o golden milk es una bebida cuya elaboración procede del sur de Asia, pero que en los últimos años ha ido incrementando su popularidad en los países occidentales. En esencia se trata de leche, pero tiene unos ingredientes que le aportan ese aspecto dorado y brillante que hace que resulte visualmente tan atractiva.
Ese color es debido a su ingrediente estrella: la cúrcuma. Esta especia, de la familia del jengibre, se obtiene al moler las raíces de la planta Curcuma longa, y ofrece numerosos beneficios para la salud. De hecho, una de sus elaboraciones más populares, la leche dorada, se ha utilizado en la medicina tradicional india para mejorar problemas de salud.
Beneficios de la cúrcuma
Sin duda, los beneficios de la cúrcuma son una de las razones por las que esta bebida se ha puesto tan de moda. Recordemos que esta especia es muchas veces llamada un superalimento, aunque bien sabemos que estos como tal no existen y que es necesario una alimentación equilibrada y variada para cuidar nuestra salud. Aunque si podemos incluir de vez en cuando en ella estos alimentos que se caracterizan por tener tantos beneficios, mejor que mejor.
Gracias a la curcumina que contiene, la cúrcuma facilita el buen funcionamiento del sistema digestivo, además de tener propiedades antiinflamatorias, antivirales y antibacterianas. Contribuye a mejorar la circulación y a reforzar el sistema inmunológico. Y, por si todo eso no fuera suficiente, también tiene propiedades antioxidantes, ayuda a regular la cantidad de azúcar en sangre y actúa como un acelerador del metabolismo.
Cúrcuma, grasa y pimienta negra
Para aprovechar los beneficios de la cúrcuma tienes que tener en cuenta dos ingredientes a la hora de preparar la leche dorada o no verás los efectos. Tal y como indican los nutricionistas, para que se active la curcumina, es necesario tomar la cúrcuma con algo de grasa y con pimienta negra, que aumentan sus propiedades y su asimilación.
No siempre se tiene en cuenta pero la grasa contribuye a mejorar su absorción por parte de nuestro organismo, puesto que la curcumina no es soluble en agua. Por ese motivo, se recomienda añadir una grasa saludable en la elaboración de la golden milk.
Cómo se prepara la leche dorada
Para preparar leche dorada necesitas leche de origen animal, como de vaca o de oveja, o alguna de tipo vegetal. En este caso, da muy buen resultado utilizar la de soja o la de almendras. Recuerda que también es necesario añadir algún tipo de grasa para que el organismo asimile la cúrcuma. Para ello se suele usar aceite de coco o mantequilla clarificada. Por último es posible agregar otras especias al gusto, como el clavo, el cardamomo y el jengibre. Si no estás acostumbrado aún a los sabores muy especiados te recomendamos comenzar probando solo con la canela y la pimienta negra.
Encontrarás muchas variaciones de la receta de leche dorada, y cada cual termina adaptándola a su gusto. Una forma de hacerla, de manera que podrás añadir lo que desees sin problema, es poner a fuego lento un cazo con una taza de leche, una rama de canela y una cucharadita de la mantequilla o del aceite de coco. Añade una cucharadita de cúrcuma en polvo y una pizca de pimienta negra cuando esté caliente. Remueve bien y agrega el resto de especies que desees. Revuelve de nuevo y retira del fuego antes de que empiece a hervir.
Cómo servir la leche dorada
Si has hecho la preparación anterior, verás que así la leche dorada ya está sabrosa, pero a los golosos que les guste el dulce, agradecerán algún tipo de azúcar en ella. En este caso, sírvela acompañada de miel o de sirope de arce o de ágave, para endulzar al gusto. En la presentación, puedes espolvorearla con canela o preparar una crema o espuma de leche para echar por encima.
Ten en cuenta que, una vez la prepares, puedes tener la leche dorada guardada en el frigorífico hasta un máximo de tres días, siempre y cuando esté en un buen recipiente hermético. Para tomarla, solo tendrás que recalentarla en un cazo al fuego o en el microondas. ¿Te animas a probarla?
