¿Es cancerígeno el talco?

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La reciente clasificación del talco, por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), como probablemente cancerígeno para los humanos ha hecho saltar las alarmas. ¿Es peligroso? ¿Debemos dejar de utilizarlo? ¿Se refieren a ciertos tipos de talco, a cantidades concretas o se trata de una advertencia general?

Como son muchas las dudas que tal cuestión genera en el uso de este producto, bastante cotidiano, nos informamos sobre todos los detalles para saber si es cancerígeno el talco y aquello que hemos de tener en cuenta a la hora de utilizarlo.

¿Qué es el talco?

Recipiente con talco natural
Recipiente con talco natural/Foto: Pixabay

El talco es un mineral silicato compuesto por magnesio, silicio, oxígeno e hidrógeno. Se utiliza con frecuencia en la industria cosmética, pero también en la construcción y la agricultura. Ello es debido a sus propiedades calmantes, antiadherentes, absorbentes, antisépticas, antiapelmazantse y antitranspirantes. Sin duda, el uso más conocido del talco se produce en los productos de belleza. Los más populares de ellos son los del cuidado de la piel de bebés y adultos.

Aunque no sea tan conocido, el talco también se usa como ingrediente para la fabricación de lacas, pinturas, cartulinas, papeles y cerámica, así como en la elaboración de productos resistentes al calor. Tampoco falta en la industria de la alimentación, donde lo encontrarás como talco alimentario en la elaboración de chicles o en antiaglomerantes, entre otros.

Estudios científicos sobre el talco

El talco ha sido objeto de numerosos estudios científicos para conocer las ventajas e inconvenientes de su uso. El último de ellos fue elaborado por un grupo de 29 científicos en el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) de la francesa ciudad de Lyon. Sus conclusiones, publicadas en agosto de 2024 bajo el título Carcinogenicity of talc and acrylonitrile, en la revista The Lancet Oncology, determinaron que se encuentra en el segundo nivel más alto de certeza de que una sustancia puede provocar cáncer.

Los resultados de los estudios que habían analizado para llegar a esta conclusión constataban que las mujeres que usan polvos de talco en el área genital-inguinal tienen más posibilidades de padecer cáncer de ovarios y que existía riesgo en general para otros tipos de cáncer en su uso.

Grupo 2A del cáncer

Manos con polvos de talco
Manos con polvos de talco/Foto: Depositphotos

Hasta este momento, el talco había estado clasificado por la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC-OMS) como posible carcinógeno. Sin embargo, tras la última reunión del organismo, en la que se tuvieron en consideración las novedades de la literatura científica, se decidió subir su nivel de riesgo. Como consecuencia, desde este verano, el talco está catalogado como probablemente carcinogénico para los seres humanos.

Esto implica que el talco pasa a formar parte de la denominada lista Grupo 2A del cáncer. Otros elementos que forman parte de ella son la carne roja, la acrilamida de las frituras y el acrilonitrilo (ACN).

Grupo 1

Para comprender el matiz entre unas y otras categorías, debemos ser conscientes de la base. Lo que sí está demostrado de cualquier manera que provoca cáncer, sin importar cantidad ni frecuencia de uso, porque son sustancias cancerígenas, son las que están incluidas en el Grupo 1 de la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC-OMS). En esta categoría se incluyen las pinturas de benceno, los rayos UVA y el tabaco, entre otras.

De tal modo, el Grupo 2 incluye sustancias que constituyen un factor de riesgo de padecer cáncer, tal como sucede con el talco, mientras que el Grupo 1 incluye sustancias que causan cáncer de por sí con total seguridad. El matiz puede parecer menor, pero resulta muy importante a la hora de considerar su uso o su consumo.

Uso de talco y riesgo de cáncer

Tal inclusión del talco en la lista de la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC-OMS) es lo que provoca que se afirme que es cancerígeno. No obstante, se suele omitir el adverbio probablemente. Además, tampoco se tienen en cuenta otros factores clave que incidirán en el riesgo de desarrollar la enfermedad. Estos son tales como la cantidad de exposición o las circunstancias particulares del individuo para que el talco incremente la posibilidad de padecer cáncer.

La inclusión de un producto como el talco en el Grupo 2 nos indica que puede causar la enfermedad, pero que su uso esporádico no tiene por qué hacerlo. Con esta clasificación, los expertos instan a la comunidad científica a que se amplíen los estudios sobre él. Sería necesario conocer la cantidad mínima o máxima diaria a utilizar, la frecuencia y el modo de utilización para poder crear una relación causa-efecto con la que poder determinar distintos niveles de riesgo. De este modo, sería posible efectuar unas recomendaciones de uso. No obstante, debido a los resultados obtenidos hasta ahora, sí se recomienda evitar el uso del talco en la zona genital-inguinal por completo.



Silvia Pato

Escritora y redactora gallega. Autora de los libros Las nueve piedras y El Libro del Único Camino, así como de numerosos relatos en revistas de género, colabora asiduamente con sus artículos y columnas de opinión en diversos medios digitales. Con la pasión y la curiosidad que la caracterizan, descubre el mundo a través de su historia, su cultura, sus lugares y sus gentes para difundir y compartir todo tipo de sensaciones y hallazgos. Porque todo viaje comienza con un solo paso.

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