Entre los meses de mayo y octubre, sandías y melones están de temporada. Es el mejor momento del año para consumirlos, cuando sus propiedades y su sabor es óptimo. Además, cuando llegan las altas temperaturas, nos ayudan a hidratarnos y a refrescarnos con facilidad.
Sin embargo, no siempre es sencillo comprarlos en el mercado o en el súper. Pero para que no te equivoques puedes seguir estos trucos caseros sobre cómo elegir el mejor melón. Toma nota y ¡disfruta de una de las frutas del verano!
Trucos para elegir el mejor melón
Producto de temporada
Para estar seguros de adquirir el mejor melón es necesario comprarlo en temporada, desde finales de mayo hasta principios de octubre. En este caso, serán de producción nacional y estarán en su mejor momento. No obstante, en otras fechas del año, serán de importación. Su consumo no será lo mismo, además de que contribuirán a contaminar más nuestro medio ambiente por el desplazamiento que ello supone. Lo mejor es priorizar productos de kilómetro cero o del país y consumirlos en temporada.
Aspecto de los melones
El aspecto de los melones es el punto clave para saber elegir el mejor de todos. Elige preferentemente los que se colocan en la parte superior de la caja o cesta, puesto que habrán sufrido menos golpes. Fíjate que no tenga hendiduras, no esté pasado ni presente daños como magulladuras o grietas. Esta es otra de las ventajas de comprar melones de tu región o de España, pues el trayecto hasta el mercado o la tienda habrá sido más corto, por lo que también habrá sido menos golpeado.
Además, resulta fundamental que el melón huela a fresco, algo que debes tener en cuenta siempre que compres frutas y verduras. Y, por lo que respecta al oído, cuando le des unos golpecitos con los dedos al melón o a la sandía deben sonar como a hueco. Si tienes dudas de cuál elegir, puede que te resulte más práctico comprar uno cortado, puesto que así verás cómo está por dentro. Si lo haces, que el corte sea del mismo día.
Elegir un melón maduro
Tampoco puedes olvidar elegir aquel melón que esté suficientemente maduro. Para saberlo, deberás presionar un extremo. Si al hacerlo, se abomba un poco, está perfecto para consumir. De igual modo, al presionar por ambos extremos al mismo tiempo, debe ceder algo; en caso contrario, tampoco estará listo para comer.
Sin embargo, si te equivocas y al llegar a casa compruebas que el melón está verde, puedes hacer una cosa. Si lo colocas junto con una manzana en el interior de una bolsa de papel, madurará antes. Recuerda colocarla en un sitio fresco y seco, y que no le de la luz solar.
Este truco también te servirá para otras frutas, puesto que la manzana produce etileno. Este, al entrar en contacto con las frutas de su alrededor, provoca que maduren con mayor rapidez. Por el mismo motivo, las frutas que estén en su punto exacto de maduración no debes de almacenarlas junto a las manzanas o se pasarán más pronto que tarde.
Sabor y dulzor
Si ya has elegido algunos melones con un aspecto adecuado, debes tener otros puntos en cuenta. ¿Cuál será el más sabroso? ¿Cuál será el más dulce? Lo primero será evitar aquellos ejemplares que tengan colores verdes o brillantes. Contrariamente a lo que puedas pensar, cuanto más mates sean y más estrías tengan, más apetitosos serán.
Por lo que respecta a su dulzor, deberás fiarte de la variedad de la que se trate. El melón de piel de sapo, que suele proceder de Castilla-La Mancha, es dulce y de sabor intenso. El melón Galia es de origen israelí, resulta muy dulzón y su textura es más mantecosa. El melón amarillo es el de sabor más suave, aunque cuenta con una pulpa crujiente. Y si buscas el melón más dulce, te encantará el de la variedad Cataloup. Es originario de América, pero ya se cultiva en más partes del mundo.
Cómo elegir las sandías
Por último, ten en cuenta que la mayoría de los trucos para elegir el mejor melón también te ayudarán a escoger la mejor sandía. Fíjate que esta no esté golpeada ni tenga hendiduras ni grietas, que su color sea intenso y opaco, que pese en relación a su tamaño y que sea lo más redonda posible. Si con estas indicaciones no olvidas tampoco darle unos golpecitos con los dedos para haber si suena a hueco, darás enseguida con la sandía en su momento óptimo de consumo.
Con estas pautas para seleccionar los melones y las sandías en el supermercado, acertarás seguro con los mejores ejemplares. Crudas, en zumos o en batidos son una opción perfecta y saludable para refrescarte este verano; aunque también puedes preparar deliciosas recetas como la sopa fría de melón con crujiente de jamón y menta. ¿Apetece un poquito?