Cuando hace mucho calor, degustar un buen café con hielo puede ser un auténtico placer. Esta bebida tiene muchos adeptos en verano, pero a no a todo el mundo convence. No obstante, existen muchas formas de preparar estos cafés especialmente veraniegos. Solo has de encontrar la que más te gusta para disfrutar de ella.
Aprende a elaborar el popular cold brew y otros cafés perfectos para el verano, con los que seguro que disfrutas de más de un momento de relax y podrás sorprender a tus invitados.
Cold brew
El café más famoso del verano es el cold brew. Para hacerlo, primero debes preparar el café con una proporción de 600 mililitros de agua y 40 gramos de café. Lo ideal es que lo muelas al momento y que utilices granos de calidad. Una vez molido, pon el café sobre una malla y después colócala sobre una jarra o recipiente de cristal. A continuación vierte el agua por encima, de manera que moje el café y atraviese la malla. Después remueve con suavidad y tapa el recipiente.
Deberás introducir en el frigorífico durante 15 horas, para que repose. Pasado ese tiempo, podrás retirar la malla que sujeta el café y beberlo. Sírvelo con una buena cantidad de hielo. ¡Está delicioso!
Café con hielo y limón
Una de las formas más refrescantes de tomar café en verano es prepararlo con limón. Prepara el café solo a tu gusto, ya sea en la cafetera italiana, en la americana o en la de cápsulas. Luego, llena el vaso o la taza de cristal donde lo vayas a servir con mucho hielo, echa el café por encima y, por último, añade el zumo de un limón. Puedes agregar menor o mayor cantidad en función de tu gusto y, si lo prefieres, echar el limón en rodajas. Remueve y ya estará listo para beber. Si lo deseas puedes endulzarlo con un poco de azúcar moreno.
Café helado con crema de cacao y avellanas
La receta del café helado con crema de cacao y avellanas es perfecta para los adictos al chocolate. Para esta elaboración necesitarás tener a mano una batidora eléctrica y unas copas o vasos altos con hielo hasta arriba para servir.
Mezcla con la batidora el café, la leche y la crema de cacao, y después vierte en las copas con hielo. La primera vez que lo prepares utiliza la cantidad de café y leche que sueles utilizar para tomarte un café con leche y añade una cucharadita de crema de cacao con avellanas. Si quieres que quede más flojo, añade un poco más de leche. En función de esto, encontrarás el punto exacto para tu paladar. Hay a quien le gusta con mucha crema de cacao, pero quien lo prefiere más suave porque, en caso contrario, les empalaga.
Affogato
Si te gusta el helado y el café, el Affogato te parecerá delicioso. Para esta receta, necesitas preparar un café expreso doble o unos 40 mililitros de café y helado de vainilla. Cómo servirlo resulta fundamental. Elige una taza o una copa para helado y coloca en ella una bola de helado de vainilla. Después, vierte por encima el café bien caliente. Y si quieres darle un toque especial a la presentación, añade un par de barquillos. ¡Seguro que quieres repetir!
Café con tónica
Perfecto para tomar en la sobremesa, después de una barbacoa en verano o como aperitivo, el café con tónica sorprende a los paladares más exigentes. Solo necesitas preparar un café doble expreso, echarlo en una coctelera y añadir cubitos de hielo. Agita para que enfríe bien. Sirve en una copa de cristal una tónica fría con un poco de hielo y añade el café de la coctelera colado. Después decora con una ramita de canela y una rodaja de lima.
Café helado con gas
Prepara 60 mililitros de café solo de la forma que desees. Agrega una cucharadita de sirope de vainilla. Remueve y deja reposar. Mientras tanto, echa mucho hielo en un vaso alto y añade agua con gas hasta un poco más de la mitad. Después, agrega la mezcla de café y tendrás listo un café helado con gas espectacular.
Recuerda que cualquiera de estas recetas puedes prepararla con café descafeinado si te preocupa la tensión o si no quieres que te quite el sueño la cafeína. Asimismo, las puedes adaptar para elaborarlas con la preparación de café que más te guste, según la cafetera que tengas o que suelas utilizar. Lo bueno de este tipo de bebidas de verano es que siempre puedes ajustarlas a lo que prefieras. Aquellos a los que les gusten las cosas muy dulces es probable que te pidan azúcar, así que tenla a mano.
