Decorar nuestro hogar, se ha convertido en uno de los elementos más destacados para muchas personas, que buscan últimamente sentirse mejor en su casa. Una reforma, adquirir ciertos productos o incluir vidrio son algunas alternativas para conseguir darle un aire nuevo a nuestra vivienda.
Precisamente en este último aspecto, hallamos gran variedad de utilidades si usamos vidrios como por ejemplo el vidrio monolítico. Crear privacidad, abrir áreas o servir como opciones decorativas: los cristales y vidrios, según los tipos, ofrecen diversas funciones. Hoy hablaremos acerca de los 9 tipos diferentes para que elijamos el ideal para nuestro hogar y nuestro proyecto.
Vidrio no es lo mismo que cristal
Muchas personas, consideran que a la hora de hablar de cristal y vidrio, estamos hablando de lo mismo, pero no es así. Ambos contienen una composición parecida. El vidrio es un material duro, frágil, transparente o traslúcido, sin estructura cristalina, obtenido por la fusión de arena silícea con potasa y moldeable a altas temperaturas. Por su parte, el cristal es un vidrio, especialmente el de alta calidad.
Los expertos ahondan en estas diferencias, ya que indican que la diferencia más destacable se centra en el proceso de los materiales. Si bien el cristal es un sólido perfecto con una estructura atómica regular, en el caso del vidrio, encontramos una estructura irregular. Otra diferencia se centra en la rotura, puesto que el vidrio tratado térmicamente como es el caso del templado, es más seguro y en caso de que se produzca una rotura, se fragmentará en diminutos trozos no cortantes.
Estos son los tipos de vidrio que podemos encontrar
En el caso del vidrio, hallamos un auténtico universo de todos ellos. El primer vidrio del que hablaremos, será el vidrio monolítico. Se trata de un vidrio constituido por una única lámina de vidrio que se realiza a través de planchas de vidrio en las que se hace flotar el vidrio fundido sobre una capa de estaño. Ofrece grandes transmisiones de luz y es un perfecto aislante térmico.
Por otro lado, encontramos el vidrio laminado. Se trata de la unión de dos o más vidrios mediante el uso de un pegamento especial. Se obtiene así una mejora en el aislamiento acústico, así como en la seguridad, debido a que si se rompe el vidrio, los trozos no caerán al suelo, sino que se quedarán fijados por el pegamento usado. Es una opción ideal frente a la intrusión de personas ajenas a nuestro hogar y además, previene de posibles accidentes en casa.
El tercer tipo de vidrio es el templado, uno de los más utilizados. Se emplea en gran cantidad de ocasiones principalmente por su dureza, resistencia e higiene. Asimismo, hay que remarcar que este vidrio no absorbe calor, por lo que mantiene una temperatura estable.
El vidrio de seguridad es otro de los más empleados. Consiste en un vidrio que, mediante distintos procesos a los que se le somete, no representa peligros por cortes. Es decir, gracias a este vidrio, la persona se enfrenta a menores riesgos en caso de rotura porque se fragmenta en trozos diminutos y por su resistencia a impactos.
En lo que respecta al vidrio lacado, encontramos que es un tipo de vidrio pintado con una pintura especial que también puede ir vitrificada. Gracias a ella se obtiene un vidrio de color, con diferentes grados de acabados. Este tipo de vidrio se destina principalmente a la decoración, por sus resultados modernos e impactantes.
El vidrio impreso, es un vidrio plano decorativo, sin color y traslúcido que se consigue mediante un gravado impreso sobre la superficie de una de las caras de vidrio. Una de las caras cuenta con un dibujo grabado en relieve y se utiliza en espacios donde se necesita intimidad o un efecto decorativo singular.
En el caso del vidrio pisable, la característica principal es la superposición de dos o más capas de vidrio intercalando entre ellas láminas de plástico muy elásticas que trasladan dicha propiedad al vidrio, ofreciéndole una resistencia suficiente como para poder caminar sobre él.
El vidrio cortafuegos es transparente e incoloro, compuesto por tres o más hojas. Al producirse una elevación de la temperatura por encima de los 140ºC, reaccionan aumentando de volumen y creando una barrera opaca de color blanco, resistente al paso del fuego.
El último vidrio que hallamos es el de doble acristalamiento. Está formado por dos o más vidrios, separados entre sí por una cámara de aire deshidratado, consiguiendo de esta manera un aislamiento térmico y acústico adecuado.
Su estética, su limpieza de líneas, su versatilidad, su tipología y el hecho de permitir el paso de la luz, hacen del vidrio un material perfecto para cualquier estilo. Ahora es el momento de dejarse aconsejar por expertos en la materia que cuenten con años de trayectoria como la cristalería en Coruña Vidrios Coruña. Con ello lograremos que el vidrio que incluyamos en nuestro hogar nos brinde numerosas ventajas para nuestro día a día.
*Contenido elaborado en colaboración con una marca