El Gobierno decidirá la ubicación definitiva del Almacén Temporal Centralizado (ATC) "con consenso", según aseguró el martes el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, después de que la polémica volviera a rodear la decisión del municipio tarraconense de Ascó de optar a acoger el silo de residuos nucleares.

El pleno del Ayuntamiento de Ascó aprobó el martes presentar su candidatura para el ATC, desafiando la opinión del presidente de la Generalitat de Cataluña, el socialista José Montilla, que se expresó públicamente en contra de esa posibilidad.

El otro municipio que optará al almacén nuclear, la localidad alcarreña de Yebra, también aprobó la semana pasada la iniciativa pese a contar con el rechazo del gobierno autonómico, encabezado por el también socialista José María Barreda.

"Tenemos tiempo y desde luego debemos de tratar de hacer las cosas lo mejor posible (...) El principio de responsabilidad nos obliga a actuar con el máximo consenso, dándonos tiempo, pero sabiendo que es necesario y que se debe poner en funcionamiento en España", dijo Zapatero en una rueda de prensa conjunta con el primer ministro noruego, Jens Stoltenberg.

La ubicación del cementerio nuclear, cuyo plazo para presentar candidaturas acaba a finales de mes, ha generado polémica y ha dividido a partidos políticos y administraciones locales y autonómicas.

Zapatero reconoció que había habido "debate" y que en este tema no estaba primando "la disciplina de partido", pero subrayó que el almacén era necesario y el Gobierno seguiría adelante con el procedimiento establecido.

"Es necesario. Es la solución de los residuos nucleares que han adoptado muchos países europeos. Es una solución segura", subrayó.

El diario El País afirmó el martes, citando a miembros de la ejecutiva del PSOE, que la "rebelión" de los socialistas Montilla y Barreda enfrentaba al Gobierno de Zapatero a un dilema de difícil solución.

"La sensación de algunos destacados miembros de la Ejecutiva federal es de que el Gobierno y, singularmente, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, no ha manejado adecuadamente la situación. Ha faltado 'coordinación e información', según las apreciaciones que se escucharon ayer en la ejecutiva federal", aseguró el diario.

"UN ASCÓ RESPONSABLE"

La moción de albergar el silo nuclear en Ascó, municipio que ya cuenta con una central nuclear con dos reactores, fue aprobada por siete votos a favor y dos en contra en un pleno celebrado con gran tensión a las puertas del consistorio, donde se manifestaron decenas de detractores de la iniciativa.

"Tenemos la oportunidad de adelantarnos al futuro y (...) empezar a construir hoy un Ascó responsable que haga más segura la gestión de combustible, un Ascó solidario que generará controversia pero sin duda aportará a la economía de la comarca unos ingresos notables", declaró el alcalde de Ascó, Rafael Vidal, de CiU, antes de la votación.

cuatro ediles de Convergencia i Unió y otro del Partido Socialista de Cataluña -, a los que se sumaron dos de los cuatro representantes del partido Independientes por Ascó, que se mostró dividido sobre el proyecto.

Uno de los dos ediles que votaron en contra de la instalación en Ascó del ATC se refirió a las "formas" utilizadas en el proceso para explicar su posición, lamentando que en un tema de tal envergadura se hubiera actuado con prisas dejando la decisión en manos de los plenos de los municipios, sin consultar a los vecinos y sin el necesario consenso.

El Gobierno aprobó el mes pasado la convocatoria para elegir al municipio que acogería el ATC, una instalación que albergaría residuos nucleares durante 60 años.

Las centrales nucleares existentes ya no tienen espacio para almacenar mucho más de las 6.700 toneladas de uranio y plutonio que acumulan en piscinas al borde de la saturación.

El Organismo Internacional de la Energía Atómica recomendó a España en 2008 que acelerara los esfuerzos por encontrar un emplazamiento construido a propósito para almacenar estos residuos nucleares.