La compañía estadounidense Xerox dijo el lunes que comprará Affiliated Computer Services (ACS) por 6.400 millones de dólares (unos 4.400 millones de euros) en efectivo y acciones, en una operación que supone el paso de la empresa a los sectores de subcontratación y gestión de datos.

El acuerdo, que implica una ganancia del 33,6 por ciento sobre el cierre de las acciones de ACS del viernes, es el más reciente de una ola de adquisiciones en el sector de servicios tecnológicos.

Hace una semana, Dell dijo que iba a comprar Perot Systems, al mismo tiempo que Hewlett- Packard consideraba vender parte de su negocio de subcontratación.

En su mayor adquisición hasta ahora, Xerox pagará 4.935 acciones propias y 18,6 dólares en efectivo por cada acción de ACS, lo que suma un total de 63,11 dólares por acción según el precio del cierre del viernes, dijeron ambas empresas en un comunicado. ACS alcanzó un récord por acción de 63,66 dólares en 2006.

La consejera delegada de Xerox, Ursula Burns, comentó que los ingresos por servicios tecnológicos se iban a triplicar a aproximadamente 10.000 millones de dólares el año próximo, frente a los 3.500 millones de dólares en 2008.

"Los clientes nos dicen 'necesitamos ayuda con toda la infraestructura de documentación'. Tenemos el componente administrativo y el componente tecnológico de la automatización. Necesitamos ayuda por el lado de la información", dijo Burns en una entrevista.

De este modo espera competir también con su rival HP, que aumentó sus servicios el año pasado con la adquisición de EDS por 13.200 millones de dólares.

Xerox asumirá 2.000 millones de dólares de deuda de ACS y emitirá 300 millones de dólares en acciones preferentes convertibles para los accionistas Clase B de ACS.

Sobre una base de beneficios ajustados, el acuerdo debería aportar ganancias a Xerox desde el primer año.

Xerox dijo que se convertiría en una compañía global con ventas por 22.000 millones de dólares tras la compra, de los cuales 17.000 millones de dólares son ingresos recurrentes. Espera ahorros de costes anuales de entre 300 y 400 millones de dólares en los primeros tres años después del cierre.

El acuerdo debería cerrarse en el primer trimestre de 2010.