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Victoria aplastante de Merkel

Las encuestas a pie de urna han confirmado la enorme ventaja de la canciller alemana sobre sus rivales socialdemócratas (26,5%), mientras que su aliado liberal FPD no alcanza el mínimo porcentaje (5%) para entrar en el Parlamento. La CDU/

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Las encuestas a pie de urna otorgan una victoria aplastante a Angela Merkel, que se haría con el 42,5% de los votos, en el mejor resultado electoral de su partido conservador desde la reunificación de Alemania. Los socialdemócratas (SPD) se quedan con sólo un 26,5%, mientras que los liberales del FPD no llegan al mínimo del 5% para entrar en el Bundestag y no podrán repetir coalición con la CDU-CSU de la canciller, al quedar como fuerza extraparlamentaria por primera vez desde 1949.

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Los Verdes obtienen un 8% y el partido excomunista Die Linke gana el 8,5%. Por su parte, los euroescépticos del partido Alternativa por Alemania (AfD) están al borde del mínimo del 5% necesario para obtener escaños, con un 4,8%. Los Piratas quedaron en el 2,5 %, claramente por debajo del mínimo exigido para entrar en el Parlamento.

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Sin embargo, el escrutinio llegó a apuntar a una posible mayoría absoluta de Merkel en el Bundestag, informa Reuters citando a la cadena pública ARD, que en algunas proyecciones otorgaba a la Unión Cristianodemócrata hasta 302 escaños, mientras que el bloque opositor quedaría en 297. La última vez que un partido alemán obtuvo mayoría absoluta parlamentaria fue en 1957 con Konrad Adenauer.

La canciller Merkel ya se ha referido a los porcentajes de voto que le dan los sondeos asegurando que"es un resultado excelente" y se actuará "con responsabilidad" ante el "claro mandato" obtenido del electorado para gobernar cuatro años más. "Agradezco la confianza depositada. Mañana abordaremos en el partido la situación, con los resultados en la mano, pero hoy es ya momento de celebrarlo", ha dicho la canciller, en alusión a lo que ocurrirá con sus socios, el Partido Liberal (FDP), que según las proyecciones de voto quedan sin escaños en el parlamento. Si se confirman estos resultados en unas horas, éstos forzarían a Merkel a alcanzar un acuerdo de gran coalición con el SPD por la salida del Bundestag de los liberales. Éstos, cuyo 4,5% de votos confirma un segundo sondeo de la cadena pública ZDF frente al 5% necesario para estar en el Parlamento, ya han reconocido vivir su "hora más amarga" desde la fundación del FPD.

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Por su parte, el SPD del aspirante a la cancillería, Peer Steinbrück, ha felicitado a la canciller Merkel por los resultados obtenidos en las elecciones, aunque la desafió a "buscar la mayoría" que precisa para gobernar, ignorando el escrutinio que da la mayoría absoluta a la CDU-CSU y difundido por la ARD. "Ha sido un gran éxito para la Unión y la felicitamos", afirmó el líder del SPD, Sigmar Gabriel, tras difundirse las proyecciones de voto. Inmediatamente después, el derrotado candidato reconoció su decepción por los resultados, puesto que, pese a mejorar respecto al 23 % de los comicios de 2009, quedó claramente por debajo de sus objetivos de poder formar una alianza de gobierno con los Verdes, que obtuvieron un 8 % de los votos. "La pelota está ahora en el tejado de Merkel. Ella debe ver cómo hace para lograr una mayoría", ha desafiado Steinbrück.

"Ya es momento de celebrarlo", ha dicho Merkel al conocer los sondeosLos principales partidos alemanes, la Unión Cristianodemócrata (CDU) y el Partido Socialdemócrata (SPD), han pedido el voto de sus electores a través de las redes sociales durante toda la jornada electoral y desde la apertura misma de los colegios. "Buenos días, hoy hay que ir a votar", dijo la Unión Cristianodemócrata (CDU), el partido de Merkel, en su cuenta de twitter, con un mensaje que viene acompañado de una foto de la canciller. "Los colegios electorales han abierto. Por favor, id a votar. Los dos votos por el SPD", dice el Partido Socialdemócrata en su cuenta de twitter.

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Merkel y su rival socialdemócrata, Peer Steinbrück, también enviaron mensajes en sus cuentas personales en los que piden el voto en un país en el que, a diferencia de lo que ocurre en España, está permitido hacer campaña incluso cuando los electores acuden a su cita con las urnas. Precisamente, a las 08.00 de la mañana de hoy abrieron las urnas de las elecciones alemanas en las que Merkel parte con la certeza, confirmada con los datos de los sondeos, de que será reelegida para un tercer mandato. La incertidumbre está en ver qué partido acompañará a la CDU en los próximos cuatro años al frente de la principal economía de la UE.

Aunque Merkel consiga reeditar su coalición en las elecciones, ésta gozará de un respaldo menor al que obtuvo en los comicios de 2009. La canciller tendría una exigua mayoría en el Bundestag, mientras que la Cámara Alta, el Bundesrat, estaría controlada por la izquierda, lo que la obligaría a tener que pactar con la oposición seguramente en ambas cámaras. Los expertos temen también que en esta coalición reeditada los euroescépticos en las filas tanto de la CDU como del FDP cobren protagonismo, impulsados también por la posible presencia del AfD en el Bundestag, lo que podría afectar a la posición alemana ante la crisis en la zona euro.

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Si la canciller quiere gozar de un colchón más cómodo en el que ampararse, entonces, debería reeditar la gran coalición con el SPD que gobernó el país entre 2005-2009 y que funcionó entonces bastante bien. No obstante, los expertos advierten de que la situación no será ahora igual de cómoda, ya que no todos los pesos pesados dentro del SPD son partidarios de esta gran coalición.

Además, tal como ha reconocido un asesor de la canciller, existe el riesgo más que probable de que el SPD opte por abandonar la gran coalición antes de que concluyan los cuatro años de mandato y trate de forzar elecciones anticipadas si cree que tiene opciones de obtener la mayoría. "Siempre habrá la opción y la tentación de que el SPD intente encontrar una mayoría sin Merkel", ha admitido. Llegado el caso, los expertos vaticinan unas negociaciones para la formación de la coalición de gobierno que podrían demorarse hasta dos meses. "Serán las negociaciones de coalición más difíciles hasta la fecha", ha subrayado Frank Decker, politólogo de la Universidad de Bonn.

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