Este artículo se publicó hace 15 años.
El último pionero en el oráculo del deporte
El título de NBA conseguido por Pau Gasol es, sin duda, uno de los grandes hitos de la historia del deporte español
Cuando Joaquín Blume mostró al mundo su cristo en las anillas durante los Europeos de París, en 1955, España encontró su principio entre los símbolos del deporte mundial. Su invención le reportó a Blume el triunfo en el concurso individual, además de la máxima puntuación en cuatro aparatos: paralelas, caballo, barra fija y anillas. Aquel triunfo acercó los grandes éxitos deportivos a una sociedad repleta de carencias que empezó a emocionarse alrededor de las radios a galena. Blume fue el pionero de ese oráculo en el que ayer accedió Pau Gasol.
El Wimbledon de SantanaManolo Santana se presentó ante los duques de Kent de blanco y con el escudo del Madrid sobre el pecho. Su triunfo en Wimbledon (1966) descubrió una esperanza de vida para quienes no tenían dinero para comprarse una raqueta de madera. Santana se construyó la primera con los restos de una silla vieja. Hace un año, el carbono ayudó a Nadal a terminar con el pesimismo sobre la hierba. "Ganará más de uno", asegura el pionero español en Wimbledon.
Nieto, 12+1La historia de la superstición que definió el 12+1 la escribe un mal estudiante. Un niño menudo que se escapaba de la escuela para ir a ver motos por la calle. Nació demasiado pronto para enfrentarse a Rossi, su mayor frustración en un deporte en el que Ángel Nieto es una leyenda. Su primer título (1969, en 50 cc) adelantó campeonatos en todas las categorías. En 1999, Crivillé cerró el círculo con el triunfo en la categoría reina ante Doohan. Lorenzo quiere este año el primer título con una moto de cuatro tiempos.
Paquito llegó del fríoEmpezó a esquiar por la misma necesidad que los keniatas empiezan a correr: para ir a la escuela. Tras aquellas primeras cuñas por Cercedilla apareció la primera medalla de oro de unos Juegos Olímpicos de Invierno. Su triunfo en el eslalon especial en Sapporo (1972) descubrió a una saga unida a la nieve.
La chaqueta verde de SeveSe vistió de verde en Augusta, un año después de haber conquistado el Abierto Británicoen Saint Andrews (1979). SeveBallesteros ha trascendido del mundo del golf. La adoración que le practica el mundo anglosajón quedó plasmado con el reconocimiento de la revista Times, que lo sitúa como el número uno de los atletas que cambiaron el deporte para siempre. En el ranking, que trata de mostrar los deportistas que cambiaron sus disciplinas para siempre, aparecen mitos como Ayrton Senna, George Best o Billie Jean King.
Sainz, El MatadorCarlos Sainz derritió la frialdad finesa en 1990. Junto a Carlos Moya, en el pequeño habitáculo de un Toyota Celica, El Matador descubrió el mundo de los rallyes para España. A su palmarés, en el que aparece un segundo título en 1992, quiere unir la primera victoria en el Dakar sobre cuatro ruedas .
El éxtasis de CachoSu oro en 1.500 metros, en el deporte rey de los Juegos, inició el cambio de mentalidad del deporte español. Cacho no fue el primer nombre en un deporte que ya contaba con el bagaje de Mariano Haro, González, Abascal o Carmen Valero. Pero su éxtasis en Montjuic, junto a los Tour y Giro de Indurain, acabaron para siempre con el fatalismo.
La muñequera de ArantxaAquella niña de 17 años, de mofletes marcados, piernas incansables y una muñequera de España prestada por su hermano Emilio, reivindicó el papel de la mujer en el deporte español. Ella, Arantxa, junto a Conchita (Wimbledon) y Vivi Ruano (la mejor doblista de la historia), convirtieron la Copa Federación en una oligarquía española durante la década de los noventa.
Alonso domina el CircoEl Circo devoró a los antecesores españoles de Alonso en la Fórmula 1. En 2005, el asturiano maximizó las prestaciones de un Renault para ampliar la cultura deportiva de la sociedad española. Su segundo título mundial, un año después, movilizó Asturias como las huelgas en la mina, décadas atrás.
Ayer, de madrugada, Pau Gasol sumó el anillo al oráculo y abrió la puerta a su presencia en el Europeo de septiembre en Polonia. Uno de los pocos títulos que aún no aparecen en un oráculo en el que la lista es interminable: López Zubero, Mengual, Amaya Valdemoro...
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