La sombra de la corrupción persigue a Lieberman
El ministro de exteriores de Israel se enfrenta a las acusaciones de cohecho y blanqueo de dinero
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El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman, anunció hoy que dimitirá si, como recomendó ayer la Policía a la Fiscalía del Estado, resulta imputado por un caso que incluye sospechas de cohecho y blanqueo de dinero.
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En una rueda de prensa convocada de urgencia, Lieberman defendió su inocencia y se aventuró a pronosticar que dentro de dos años seguirá al frente de la diplomacia israelí y de su partido, el ultraderechista Israel Beitenu.
La Policía de Israel recomendó ayer a la Fiscalía del Estado el procesamiento del ministro israelí de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman, bajo los cargos de fraude, cohecho, blanqueo de dinero, acoso a testigos y obstrucción a la justicia.
Lieberman fue un hombre clave en la formación del nuevo Gobierno de Netanyahu tras las elecciones. Líder de la extrema derecha israelí es considerado el azote de los palestinos.
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Su posición sobre temas como los asentamientos de Cisjordania es un gran obstáculo para que avancen los planes de paz.
Hasta el punto de que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, llegó a compararlo con Jean-Marie Le Pen, el histórico líder de la extrema derecha francesa.