Solbes no comparece con Ordóñez para preservar la independencia del Banco de España

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, se defendió hoy de las críticas que reclaman que acuda antes al Congreso para informar sobre la intervención de CCM y explicó que no comparecerá mañana con el gobernador del Banco de España para "preservar la independencia" del organismo supervisor.

Durante la sesión del Control al Gobierno en la Cámara Baja, Solbes se mostró además "encantado" de comparecer "cuando ustedes quieran".

El titular de Economía insistió en que la intervención de Banesto en 1993 "no tiene nada que ver" con la de Caja Castilla-La Mancha (CCM) "ni por la naturaleza ni por la dimensión de la operación", y aseguró que en aquella ocasión sí comparecieron juntos ministro y gobernador pero de manera excepcional y como "respaldo", porque "no es habitual" que se haga así.

De esta forma respondió Solbes a las críticas del diputado del PP Álvaro Nadal, quien le recriminó que no haya acudido antes al Congreso a dar explicaciones sobre "la medida más contundente en el ámbito bancario hasta ahora", e insistió en que con Banesto sí se hizo.

Nadal también lamentó que Solbes haya calificado la intervención de CCM de "anecdótica, de mero trámite" cuando es "muy importante" porque se trata de una entidad con un millón de clientes y 3.200 trabajadores.

"Le parecerá poco el peso de CCM, pero en Castilla-La Mancha todo el mundo está pendiente de que se le de explicaciones", subrayó, tras exigirle "mayor claridad".

Ante estas críticas, Solbes reconoció que CCM sí es relevante en su región, pero defendió que "la cosa hay que situarla en su contexto" porque la caja es pequeña dentro del conjunto del sistema financiero español.

El titular de Economía insistió, una vez más, en que la caja castellanomanchega se intervino porque después del fracaso de la primera opción de llegar a un acuerdo en el ámbito privado se había lesionado "la posición del coeficiente regulatorio y había riesgo de que se lesionara más".

A partir de ahí, apuntó, se deciden los 9.000 millones de euros de aval porque el Banco de España "pensó que era la cantidad máxima necesaria para evitar cualquier nuevo decreto ley".