Este artículo se publicó hace 14 años.
Sócrates no subirá el IVA y confía en la evolución de la economía portuguesa
El primer ministro de Portugal, José Sócrates, aseguró hoy que no va subir el IVA y se mostró confiado en la evolución de la economía portuguesa por las muestras de recuperación que ha dado en el primer trimestre del año.
El dirigente socialista luso reiteró que cumplirá el programa de inversiones del Estado en lo que se refiere a las grandes obras públicas previstas para los próximos años, como el tren de alta velocidad con España y el nuevo aeropuerto de Lisboa.
Durante un debate en el Parlamento, Sócrates subrayó que su Gobierno va a cumplir "fielmente" el Programa de Estabilidad y Crecimiento (PEC) presentado a Bruselas el mes pasado y que prevé reducir el déficit fiscal portugués del actual 9,4% al 2,8 en 2013.
Parte de las medidas de ahorro estatal contempladas en ese plan para 2011 y 2012 han sido adelantadas a 2010 y Sócrates considera que, con ellas, se va a cumplir el objetivo de bajar este año el déficit al 8,3% por ciento y no será necesario subir el IVA o aplicar otras correcciones.
El primer ministro destacó la evolución positiva de los indicadores de marzo sobre la economía portuguesa y calificó de muy "buena señal" el crecimiento del 9% de las exportaciones, el 34% de la producción de automóviles y el 3,8% de la producción industrial.
"Unos indicadores como éstos habrían puesto a los estadounidenses a bailar", comentó el líder socialista portugués, quien agregó: "confiamos y seremos fieles a nuestro programa".
Ante las críticas de los partidos de la izquierda marxista y los sindicatos, que no han parado de convocar huelgas en la última semana, Sócrates aseguró que el PEC luso está dirigido tanto a equilibrar las cuentas públicas como a relanzar la economía.
Este año se ha registrado un incremento de los ingresos fiscales del Estado y las medidas de ahorro puestas en marcha en el sector público van a tener un impacto positivo, vaticinó el gobernante, reelegido en septiembre pasado para un segundo mandato de cuatro años, aunque sin la mayoría absoluta que logró en el primero.
Entre ellas resaltó la reducción de funcionarios, con la sustitución de sólo uno de cada dos que causen baja; el recorte del desempleo y otras ayudas sociales, la supresión del 40% de la inversión militar, los ahorros en comunicaciones y automóviles del Estado y los nuevos peajes e impuestos que gravan las plusvalías bursátiles (20%) y las rentas superiores a 150.000 euros (45%).
Las inversiones en obras públicas, en las que sólo habrá recortes en la construcción de autopistas, se mantendrán por su contribución al crecimiento de la economía y el empleo, argumentó el primer ministro.
La desconfianza de los mercados en la economía portuguesa y el temor a que sufra un contagio de la crisis griega ocasionaron esta semana una nueva rebaja de sus calificaciones crediticias y un aumento de las primas aplicadas a los intereses de su deuda, que fueron consideradas injustificadas por el Gobierno luso.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.