El sindicato de controladores dice que éstos se incorporan a sus puestos

El secretario de comunicación de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), César Cabo, ha declarado hoy a EFE que los miembros de este colectivo se están incorporando a sus puestos de trabajo y que "se está recuperando la normalidad" en "muchos" de los aeropuertos y centros de control.

Después de que el Gobierno decretara hoy el estado de alarma por primera vez desde la aprobación de la Constitución en un Consejo de Ministros extraordinario, Cabo ha explicado a la prensa que la junta directiva del sindicato "ha conseguido a última hora de la mañana que los trabajadores vuelvan a sus puestos".

El portavoz sindical ha comentado que ha sido "muy difícil convencer a una plantilla muy castigada a lo largo del último año".

En este sentido, se ha referido al decreto ley aprobado ayer por el Gobierno que regula el horario laboral de este grupo profesional y que no computa como jornada el tiempo de formación, las guardias y licencias o las ausencias por incapacidad laboral.

Para Cabo, los controladores han sido objeto de "otra provocación en forma de decreto ley en la víspera de uno de los puentes más importantes del año", lo que, en su opinión, "no fue casual".

"Entendemos -ha asegurado- el perjuicio causado a pasajeros y compañías aéreas, pero ha de valorarse la virulencia de la provocación hecha desde AENA", a la que Cabo ha hecho única responsable de la situación.

Sobre la negociación con la administración, ha confiado en retornar a ella, pues los controladores "siempre están abiertos" a esto.

"No tenemos condiciones, nunca las hemos puesto. Queremos negociar, pero que se respeten -ha advertido- nuestras condiciones como trabajadores".

El dirigente de USCA ha precisado que no dispone de información de todos los centros de trabajo, aunque ha indicado que ya están despegando aviones y que otros no lo hacen todavía porque no han embarcado los pasajeros.

Así, ha confiando en que la normalidad se recupere "paulatinamente" durante la tarde.

Preguntado por la declaración de estado de alarma, ha comentado que es una decisión "bastante extrema", que constata una situación "muy difícil", es decir que los controladores estaban "fuera de sí por las provocaciones de los últimos meses".

Ha denominado la reacción de los controladores como "explosión espontánea" que se ha propagado de torre en torre.

Ha añadido que quedar sometidos ahora a las leyes penales y disciplinarias militares es algo "excepcional" y que ello también es muestra de que hay que resolver la situación de los controladores.

En cuanto a que USCA recurra el decreto ley, ha señalado que es algo que tendrán que valorar los abogados del sindicato.