El Banco Santander ha completado con éxito la colocación en el mercado de la emisión de bonos por valor de 7.000 millones de euros con la que prevé financiar la compra de activos del holandés ABN Amro, informó hoy la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Los bonos han sido distribuidos entre cerca de 129.000 inversores, que han realizado una inversión media de unos 54.000 euros, explica la entidad.

Si la adquisición del banco holandés por parte del consorcio formado por Royal Bank of Scotland (RBS), Fortis y Santander fructifica, los bonos serán necesariamente convertibles en acciones de la propia entidad.

En el caso de que la operación no salga adelante, el comprador de estos instrumentos, que ahora se denominan "valores Santander", recibiría en octubre del año próximo el 7,5% TAE más el cien por cien del capital invertido.

No obstante, el banco confía en que la operación fructifique y será entonces cuando estos valores se conviertan automáticamente en obligaciones convertibles y cuando la entidad fije el precio de la operación de canje para la conversión en acciones, que según el folleto de emisión de los bonos, corresponde al 116 por ciento del valor de los títulos del Santander en el momento en que se ejecute la compra.

Fuentes del mercado señalaron a Efe que esta transformación automática de valores Santander a obligaciones convertibles se produciría entre finales de este año y el primer trimestre de 2008, en coincidencia con la ampliación de capital que también tiene prevista realizar el Santander para la compra de activos.

La junta de accionistas del banco aprobó el pasado verano que, para financiar la compra de la entidad holandesa, se pudieran emitir títulos por valor de unos 4.000 millones de euros, además de los bonos convertibles, que tendrán un interés del 7,50% TAE el primer año y del Euribor a 3 meses más un diferencial del 2,75% los cuatro años restantes.

El folleto de la emisión de los bonos por 7.000 millones de euros fue aprobado por la CNMV el pasado 19 de septiembre.

Inicialmente, el importe previsto de la emisión era de 5.000 millones de euros, pero el Santander decidió aumentar la cantidad tras comprobar la demanda que existía en el mercado para hacerse con estos bonos.

Ante esta buena acogida de los bonos de Santander, algunas entidades, como el BBVA, cajas de ahorro, como Caixa Catalunya y gestoras, como la sociedad gestora de fondos de las cajas rurales, Gescooperativo, explicaron a su red de sucursales cómo defenderse de una posible retirada de fondos de sus clientes para comprar estos valores.

El BBVA distribuyó una nota en la que recordaba que la rentabilidad de la inversión no está garantizada y depende de la evolución de la acción del Santander.

Por su parte, la sociedad gestora de fondos de las cajas rurales, Gescooperativo, explicó en una circular interna enviada a sucursales del Grupo, las características de la emisión y los "riesgos" que supone, al depender su rentabilidad de la evolución de la acción del banco.

Si la operación fructifica, al Santander le correspondería pagar unos 19.900 millones de euros, mientras que el Royal Bank of Scotland tendría que abonar 27.200 millones y Fortis, 24.000 millones.