Sanidad vigila que la gripe no entre en los hospitales

Sanidad centrará sus esfuerzos a partir de ahora en evitar que la nueva gripe afecte a los enfermos más graves que están ingresados en los hospitales, como aquellos que padecen cuadros respiratorios graves. Es el cambio de estrategia que acordó ayer el Comité Ejecutivo Nacional de Gripe, que se reunió para coordinar las medidas que se tomen en España contra la enfermedad, después de que el jueves la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretara la alerta por pandemia.

"Los esfuerzos de los servicios sanitarios deben concentrarse en asegurar el tratamiento adecuado a los enfermos. Pasamos de una fase de contención a otra de mitigación, de atenuar los efectos negativos que pueda tener la pandemia", explicó ayer la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez. Una red de "médicos centinela" velará para evitar que el virus H1N1 se propague entre aquellos cuyo estado de salud es ya precario.

Pautas adecuadas

Jiménez destacó que España ya "se ha adelantado a muchas de las decisiones y acciones" que la OMS ha pedido a los países que pongan en marcha. La ministra explicó en una entrevista en Antena 3, previa a la reunión, que la nueva gripe ha afectado en España a hombres sanos, de entre 20 y 30 años. "Los síntomas son muy leves y a los tres días han evolucionado favorablemente", recordó.

La titular de Sanidad explicó que su departamento espera a que los epidemiólogos averigüen por qué el virus afecta en su mayoría a personas sanas y fuertes. Algunas de las especulaciones de los expertos apuntan a que las personas mayores se suelen vacunar cada año contra la gripe estacional y que muchos pasaron la gripe de la década de 1950 y están por ello inmunizados, resumió Jiménez.

Jiménez explica que es el momento de "atenuar los efectos negativos"

Por otra parte, la nueva gripe se ha cobrado la vida de los más desfavorecidos, ciudadanos en su mayoría de México. "Son los grupos de población más vulnerables, personas menos saludables y con otro tipo de enfermedades asociadas".

"La ventaja de España es que es una población muy sana y el servicio público de salud permite que la gente pueda acudir a él de forma inmediata al primer síntoma", tranquilizó la ministra.

No se hospitaliza

Una vez decretada la alerta por pandemia, Sanidad ha dejado de hacer público el número de personas infectadas de nueva gripe cada semana, así como el de casos en estudio, ya que la cifra asciende de forma rápida. Jiménez recordó que ya no se hospitaliza a los infectados, aunque sí se les aísla en sus casas por precaución. "Al principio no conocíamos el virus ni su grado de desarrollo, por eso los aislábamos en el hospital", explicó la ministra.

Una vez definido el virus H1N1, la vacuna estará lista en otoño. Jiménez recordó que no se inmunizará a toda la población, sino sólo a quienes lo necesiten. Las autoridades sanitarias de España, la UE y la OMS trabajan para detectar los grupos con mayor riesgo de contraer la enfermedad, que serán a quienes se les aplicará la vacuna.

El director del centro de investigación en enfermedades transmisibles de Zaragoza, Juan José Badiola, defendió ayer, en unas jornadas médicas celebradas en Valencia, las medidas aplicadas hasta ahora por Sanidad.