Este artículo se publicó hace 15 años.
Preocupa la muerte de salamandras en México y Guatemala
Muchas especies de salamandras en México y Guatemala han sufrido dramáticas caídas en su población desde la década de 1970, probablemente por el calentamiento global y otros factores, según dijeron el lunes científicos estadounidenses.
El destino de las salamandras es la última prueba de las grandes pérdidas de anfibios entre la población mundial, un fenómeno que para algunos expertos es una señal del final de muchos tipos de animales.
El biólogo David Wake, de la Universidad de Berkeley, en California, y sus colegas siguieron la pista de cerca de 24 especies de salamandras en distintos puntos de Guatemala y del sur de México.
Un sitio en el que se centraron fue la región de San Marcos de Guatemala, analizando una de las más estudiadas y diversos grupos de salamandras del trópico.
Comparado con los niveles de medidos de la década de los 70, la población de la mitad de las especies en los dos países cayó de forma notoria. Aparentemente cuatro de ellas se han extinguido y una quinta está casi totalmente desaparecida, dijo Wake.
La causa es probablemente una compleja combinación de factores.
Entre ellos se incluye el calentamiento global y la elevación de las temperaturas, que obligan a las salamandras a ir en búsqueda de hábitats a mayor altura y menos confortables, así como la destrucción de sus hogares y una enfermedad provocada por hongos, añadió Wake.
"Hemos documentado lo que se temía desde hace tiempo: que las salamandras tropicales están siendo duramente golpeadas por algo y que están desapareciendo", destacó el científico, cuyos descubrimientos aparecen publicados en la revista "Proceedings of the National Academy of Sciences", en una entrevista telefónica.
Las especies que anteriormente eran consideradas como las más comunes han sido las más golpeadas, agregó Wake.
Muchos científicos están preocupados por el hecho de que el cambio climático tenga un impacto terrible en las poblaciones animales, siendo las primeras afectadas aquellas que residen en los lugares más sensibles, como los osos polares del Ártico.
Algunos expertos ven a los anfibios actuales, cuyos ancestros fueron los primeros vertebrados terrestres, como una especie experimental que nos advierte de desastres futuros dentro del reino animal.
Pese a que no se incluyó dentro del estudio, Wake comentó que muertes similares están ocurriendo con las salamandras en Costa Rica.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.