El pasado viernes 29 de diciembre, el Gobierno anunció un recorte de 200 millones de euros en los presupuestos de RTVE. Esta decisión hizo saltar las alarmas del Consejo de Administración, ya que cree 'inviable' una televisión pública de calidad con un recorte de semejante envergadura. Miguel Ángel Sacaluga, consejero de RTVE, cree que un recorte de este calibre es un cambio de modelo 'por la puerta de atrás'.

¿De qué manera afectará a RTVE el recorte planteado por el Gobierno?

Un recorte de 200 millones de euros pone en peligro el modelo de servicio público tal y como estáconcebido ahora y como lo define la ley. Por ello, desde el Consejo vamos a intentar hacer ver al Gobierno la situación en la que se encuentra RTVE con la esperanza y la intención de que reconsidere a la baja este recorte. Si no es posible habría que replantearse otra televisión diferente a la actual. Y esa decisión le corresponde alGobierno y no a nosotros.

Recortar 200 millones es una reforma de RTVE por la puerta de atrás

¿Qué tipo de televisión pública quedaría si el Gobierno continúa con este recorte?

Depende de la voluntad política del Gobierno. Pero, desde luego, sería una televisión muy diferente a la que estamos haciendo. Ahora somos líderes en audiencia, líderes en credibilidad y en confianza de los ciudadanos y, además, sostenibles. Se ha demostrado que el modelo de financiación funciona. Y si no conseguimos que el Gobierno rebaje ese recorte de 200 millones de euros, sería una reforma del modelo por la puerta de atrás.

¿Entiende que esta decisión obedece a una estrategia oculta del Gobierno respecto al RTVE?

El Partido Popular ya dejó clara en las enmiendas que fue proponiendo a la ley de Financiación de 2009 cual era su visión de RTVE. Primero, propuso reducir el presupuesto en 200 millones cuando la crisis aun no era de este calibre. Además, quiso eliminar la tasa del 0,9% que aportan las operadoras de telecomunicaciones y, por último, propuso reducir del 3% al 2% la aportación de las televisiones privadas a los presupuestos. También hay que contar con la subida del IVA. Si hacemos cuentas, esto significa que RTVE dejaría de recibir 600 millones de euros, es decir, la mitad de su presupuesto, lo que demuestra que el Partido Popular no cree en la televisión pública y, lo peor de todo, que para justificar esteasunto no dice que es por la idea que tiene de RTVE, sino porque la actual ley de financiación no funciona. Y eso no es verdad.

El Gobierno está poniendo en peligro un servicio público esencial

Algunos consejeros apuntan a la reintroducción de la publicidad como única solución.

Volver a la publicidad no tiene sentido y, para demostrarlo, sólo hay que hacer cuentas. Actualmente, las operadoras privadas de televisión en abierto y de pago aportan dinero a RTVE a cambio de que TVE abandone la publicidad y los contenidos de pago. Por tanto, si nosotros metemos publicidad, por ejemplo, cuatro minutos por hora, la razón por la que el Estado le impone esta tasa a las operadoras privadas dejaría de existir y las privadas se negarían a pagarla o pagarían una tercera parte de lo que pagan ahora. Por tanto, lo que ingresas por un lado, lo perderías por otro.

¿Hay ánimo en el Consejo de Administración de plantar cara al Gobierno o se ve como una batalla perdida?

Yo, desde luego, estoy dispuesto a pelear por el modelo actual. El Gobierno está tocando una televisión que después de muchos años de deudas, por primera vez no está cuestionada por los españoles. Y encima, es equilibrada económicamente. La primera respuesta del Consejo fue que no vamos a bajar los brazos y vamos a intentar convencer al Gobierno de que está poniendo en peligro un servicio público esencial. Una cosa es recortar un poco y otra ensañarse.