Cuatro días después de que no regresara a su casa, la policía continúa investigando la desaparición del empresario de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) Rafael Ávila, de 45 años.

Fuentes de la investigación han dicho hoy a Efe que mantienen abiertas todas las pesquisas, ya que aún no se ha podido corroborar que la desaparición pueda deberse o no a un secuestro.

La desaparición de Ávila fue denunciada por su padre el pasado miércoles día 3 al no acudir el empresario a dormir a su casa.

Este hecho alertó a los familiares, que se presentaron en dependencias policiales para presentar una denuncia y aseguraron que se podía tratar de un secuestro, aunque según la policía no se presentó ninguna prueba que corroborase esta hipótesis.

Fuentes cercanas al entorno del desaparecido han manifestado que Ávila fue visto por ultima vez en la madrugada del pasado martes y como ha afirmado hoy a Efe el capataz general de Bodegas Argüeso, Mariano Galán, "nadie ha vuelto a saber nada de él". Ávila es accionista de estas bodegas.

Galán ha desmentido la versión de algunos medios de comunicación locales según la cual la familia ha recibido una llamada anónima pidiendo diez millones de euros a cambio de la liberación del empresario y ha asegurado que "nadie ha llamado para pedir nada por la libertad de Rafael".

El capataz general de las bodegas ha dicho que la familia del empresario se encuentra "muy afectada" y muy pendientes de la evolución del caso, que ha cogido por sorpresa a todos, porque "son una familia muy querida y que no tienen problemas con nadie".