Mueren dos personas en Georgia en el derribo de un monumento a los caídos en la II Guerra Mundial
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Las autoridades georgianas dinamitaron hoy el principal monumento instalado en el país a los caídos en la II Guerra Mundial, en un polémico acto en el que murieron dos personas alcanzadas por los fragmentos y que levantó protestas en el país y en la vecina Rusia.
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El canal de televisión Imedi mostró la voladura del monumento de la Gloria Militar, de casi cien metros de altura e instalado hace 25 años en la segunda ciudad del país, Kutaisi, en memoria de los georgianos caídos en la guerra contra el nazismo.
El Ministerio del Interior denunció que durante la explosión del monolito de hormigón armado murieron una mujer y su hija de ocho años, que fueron alcanzadas por los fragmentos esparcidos, y varias personas más resultaron heridas.
La Fiscalía acusó de negligencia a la compañía privada encargada de volar el monumento, mientras que la Presidencia anunció el retorno urgente del líder georgiano, Mijaíl Saakashvili, que se encontraba en Copenhague, donde asistió a la cumbre sobre cambio climático.
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El Gobierno ordenó el derrumbe del monumento para edificar en su lugar una nueva sede del Parlamento, que las autoridades decidieron trasladar a la ciudad de Kutaisi, situada a 236 kilómetros al oeste de la capital.
La decisión ha motivado protestas de veteranos de guerra, intelectuales y opositores al régimen de Saakashvili, que lo acusan de autoritarismo y de haber provocado la guerra con Rusia de agosto de 2008 por el control de la región separatista Osetia del Sur.
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Desde Moscú, el ministerio de Exteriores ruso denunció que, al ordenar el "bárbaro" derrumbe del monumento a los caídos, las autoridades georgianas cometieron "un acto de vandalismo de Estado que ofende los sentimientos de toda persona civilizada".
Según la Cancillería rusa, el Gobierno de Saakashvili "desafía así a toda la comunidad mundial", que en la Asamblea General de la ONU acaba de expresar su preocupación por los intentos de profanar o destruir en el mundo monumentos a los luchadores contra el nazismo.
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"El sacrilegio cometido hoy en Kutaisi supone otro vergonzoso acto de los actuales dirigentes de Tiflis en su maníaca obstinación por borrar la memoria histórica de su propio pueblo", señaló la diplomacia rusa en un comunicado oficial.
Mientras, el Ayuntamiento de Kutaisi recordó que el monumento fue saqueado en la década de 1990, cuando fueron robadas secciones de bronce y muchos fragmentos, por lo que no podía ser restaurado y será sustituido próximamente por otro monumento a los caídos en la guerra.