Mucha gente y muchas ganas en la apertura del salón de lotería

A las 8 en punto de la mañana se han abierto las puertas del edificio de la lotería: por una de ellas han entrado los 36 niños encargados de cantar los números, por la otra algo mas de 300 personas que esperaban para verlo en directo.

El sorteo extraordinario de Navidad, que se celebra por última vez en el edificio de la calle de Guzmán el Bueno de Madrid, ha congregado aficionados de todo el país que quieren ver repartir más de 2.300 millones de euros.

Desafiando el frío desde las nueve de la noche de ayer el alicantino Paco y su amigo Matías, de Gredos, se han plantado a la puerta para volver a ser los primeros en entrar en el salón, que está presidido por dos inmensos bombos, uno con los premios y otro con los números.

A los madrugadores Paco y Matías se les ha ido uniendo a lo largo de la noche unas 200 personas que, armadas de vasitos de aguardiente y bocadillos, han esperado pacientemente para lograr un sitio en el salón en el que hoy, a partir de las 9 de la mañana, se repartirá la suerte.