El técnico del Real Madrid José Mourinho fue uno más entre sus jugadores, en el acto de entrega de los nuevos coches Audi en el estadio Santiago Bernabéu, en en el que también estuvieron presentes el presidente de la entidad, Florentino Pérez, y Zinedine Zidane.

El Real Madrid cambió la nieve de la pista cubierta de esquí Snow Zone de Madrid de Arroyomolinos, donde recogió los coches la pasada temporada, por el estadio Santiago Bernabéu. "El lugar donde se materializa el sueño de los madridistas", dijo Florentino Pérez.

Alrededor del terreno de juego estaban aparcados los 26 coches personalizados para cada futbolista del Real Madrid, con una novedad, la presencia de Mourinho. En los años precedentes el técnico recibía coche pero no estaba presente en el acto de entrega.

Hoy, Mourinho fue uno más. En la primera parte del acto, cuando recibían la llave del automóvil de manos de un niño socio del club, al que firmaban en su camiseta, el técnico portugués, sentado junto a sus jugadores, recibió las mismas bromas.

Fue silbado por los futbolistas cuando fue nombrado. Con la misma intensidad que Sergio Ramos, Cristiano Ronaldo e Iker Casillas, los más alentados por el grupo en un acto en el que la única ausencia fue el alemán Sami Khedira por motivos personales.

"Este acto es una tradición para el Real Madrid. Forma parte de una estrecha y leal relación entre dos marcas que aspiran al liderazgo mundial. Nosotros buscamos la perfección en el fútbol", dijo el presidente del Real Madrid.

Aprovechó el momento para felicitar a su equipo por el triunfo en el derbi madrileño. "Felicidades a todos por el partido de anoche. Tenemos que seguir trabajando porque la exigencia es enorme, pero vamos en la dirección adecuada".

La relación entre Audi y el Real Madrid se inició en 2003. Fue el octavo acto de entrega de los coches que los jugadores tendrán durante un año. Cristiano Ronaldo fue el jugador que eligió el modelo más deportivo, un RS5 azul. La mayoría optó por un todoterreno familiar o el modelo deportivo del A7. Esteban Granero fue el que optó por el coche más económico, un S3.