Más de 400 personas acudieron hoy a la concentración convocada por los vecinos de O Eixo para despedir a los tres hombres que esta noche ingresan en la prisión de Teixeiro condenados a siete años de cárcel por haber agredido a agentes de la Policía durante una protesta vecinal.

Los hechos por los que estos hombres, sin antecedentes penales hasta entonces están condenados, ocurrieron hace nueve años cuando los vecinos protagonizaron una protesta para pedir la construcción de un paso subterráneo bajo una carretera muy transitada.

La presencia de policías en esa concentración motivó que se alteraran los ánimos y se registraron las agresiones por las que tres vecinos han sido condenados.

El secretario de la asociación de vecinos de O Eixo, José Manuel Bocija, mostró su asombro por el número de personas que se reunieron para despedir a los condenados y aseguró que dos autobuses los acompañarán hasta la entrada de la prisión.

Tan sólo uno de los condenados, claramente emocionado, acudió a la concentración para agradecer el gesto de sus vecinos puesto que a los otros dos, según explicó Bocija, se les hizo tarde al salir de casa y debían ir directos a la cárcel de Teixeiro.

Uno de los ocho agentes sufrió secuelas físicas graves, tiene una minusvalía del 73 por ciento que le invalida, declaró el responsable del Sindicato Unificado de la Policía de Galicia, José Freire López.

El pasado 21 de octubre una multitudinaria manifestación transcurrió por las calles compostelanas para exigir al Gobierno el indulto, por lo que Bocija explicó que, tanto los inculpados como sus familias, "se encuentran un poco más animados" puesto que "esperan que prospere el indulto".

Los vecinos de O Eixo mostraron su confianza en que el movimiento ciudadano y las protestas que esta "injusticia" ha suscitado haga recapacitar al Consejo de Ministros puesto que, según les contaron las personas que mantuvieron la reunión con representantes de Gobierno, éstos estaban "muy al tanto de todo lo que estaba ocurriendo aquí", afirmó un vecino.

En representación del Ayuntamiento compostelano acudió a la concentración el concejal de cultura, Néstor Rego, quien se mostró optimista ante el posible indulto puesto que, "que estos tres vecinos ingresen en prisión, no favorece la situación del policía afectado".

En la manifestación el escritor Suso de Toro, encargado de la lectura de un manifiesto al termino de ésta, recordó que hace nueve años los vecinos de O Eixo llegaron a un acuerdo con el Ministerio de Fomento, del que entonces era responsable el popular Francisco Alvarez Cascos, para mejoras de seguridad vial en la zona.

"Hubo un intercambio de golpes y un policía declaró en un parte médico" que tenía lesiones y, a partir de ahí, "tres líderes del movimiento vecinal, tres personas realmente inocentes, van a entrar presas".