Los integrantes del Kalise Gran Canaria y sus seguidores confían en que salvarán los siete puntos que el KK Bosna trae a la isla (89-82) y pasarán a los octavos de final de la Copa Uleb de baloncesto.

Salva Maldonado, técnico del equipo canario, dijo hoy que la misión inmediata en esa competición "no será fácil", pero, con la ayuda de sus incondicionales, en el Centro Insular de Deportes, "lo conseguiremos", matizó.

Maldonado quiere que los baloncestistas que dirige acometan ese choque ante el rival bosnio con fortaleza mental y aunque conoce que el facto cancha es "importante", estimó que la clave se centrará en "jugar bien y continuados; duros en defensa y, en ataque, encontrar nuestras opciones para anotar".

"Hay que tener visión de futuro durante el partido y no tener prisa; marcarnos el objetivo al final. No sirve de nada hacer cábalas desde el principio, esto no lleva a nada", explicó.

Del adversario de turno, el técnico barcelonés estimó que es "capaz" y bien estructurado, algo que plasma en su relevante juego interior, "que nos hizo mucho daño en la ida y al que tenemos que estar muy atentos en casa", advirtió.

Asimismo, los jugadores del Gran Canaria pretenden darle una alegría a su fiel afición, después del traspiés que representó la derrota que les propinó el Pamesa Valencia, algo que les aleja de la fase final de pugna por el título de la Liga ACB.

En ese sentido, el jugador húngaro Kornel David afirmó de manera rotunda: "Remontaremos la eliminatoria".

"Se trata de un equipo complicado, pero estamos con mucha confianza para conseguirlo".