José Carreras dice que los Tres Tenores acabaron el 6 de septiembre

El tenor español José Carreras, tras casi cuatro décadas consagrado entre los mejores tenores de su tiempo y después de haber superado, hace casi 20 años, una leucemia que lo colocó a las puertas de la muerte, se siente hoy "una persona afortunada".

Las palabras del cantante, de 61 años, tienen una seriedad existencial pronunciadas ahora, apenas un mes después de perder a su colega y amigo Luciano Pavarotti, con quien, junto a Plácido Domingo, formó en decenas de ocasiones el grupo de "Los Tres Tenores", un conjunto que hoy, durante una entrevista con Efe, calificó de "irrepetible".

"Los Tres Tenores acabaron el 6 de septiembre de este año", afirmó Carreras, en referencia a la fecha en que murió el italiano.

"Yo creo que es irrepetible, porque los Tres Tenores éramos nosotros tres, y no creo que en ningún momento nos vayan a ofrecer siquiera la posibilidad de sustituir a Luciano Pavarotti, sería una falta de rigor ético y de rigor moral tremenda", aseguró.

Sin embargo, dijo que Domingo y él están "siempre abiertos a hacer cosas juntos", y que aunque "de manera individual" ya han homenajeado a Pavarotti, no descartó la "posibilidad de hacer algo en Nueva York, en el Central Park, cuando haya una efemérides o un aniversario concreto".

"Estamos contemplando esta posibilidad, y a mí evidentemente me encantaría", reveló Carreras, que añadió: "Siempre es un placer tener la posibilidad de actuar con Plácido (Domingo), una persona tan extraordinariamente vital que te involucra, aunque no lo quieras, en los proyectos, en los ensayos".

"Es un hombre con el que es una verdadera maravilla trabajar por este entusiasmo que tiene, a pesar de más de 40 años de trayectoria profesional que tiene por su trabajo", le elogió.

Carreras recordará mañana en Shanghai una de las noches más inolvidables de su vida, cuando cantó "Amigos para siempre", de Webber, junto a la soprano Sarah Brightman en la clausura de los Juegos Olímpicos de Barcelona (1992).

Ante cerca de 40.000 personas, que llenarán en el antiguo estadio Jiangwan de Shanghai, el tenor barcelonés interpretará la misma canción, junto a la soprano china Liu Lian, durante la clausura de los Juegos Olímpicos Especiales que se han celebrado en China, y el viernes 12 dará otro concierto en el que cantará en mandarín.

A 29 pisos de altura en Lujiazui, el próspero distrito financiero shanghainés, Carreras se reconoce un hombre afortunado.

"Al cabo de 37 años de trayectoria profesional, tengo todavía la posibilidad de subir al escenario y, ya sé que suena a tópico, pero es la verdad, de intentar transmitir emociones, que es la 'misión' del artista", subrayó.

"Yo no pido nada más que esto para los próximos años, que quién sabe cuántos van a ser, y evidentemente no van a ser muchos, pero quiero intentar disfrutarlo lo máximo posible", explicó.

"Lógicamente, cuando uno va viviendo más cerca el final, parece que todavía tiene más ganas, se estimula más incluso", confesó.

"Uno se da cuenta de lo importante que ha sido el poder dedicarse a una profesión como esta, tan vocacional, y que da tantísimas satisfacciones, aparte de la presión, los nervios y las inseguridades", evocó.

En ocasiones casi tan expresivo en la conversación como en la música, con la misma voz que mima y trabaja a diario desde su juventud, trata de no hablar mucho antes de un concierto y se pone a salvo, sistemáticamente, de todo aire acondicionado, Carreras subrayó además la importancia de llegar al gran público.

"Cada día hay más compañías de ópera y más gente que se interesa por ella, pero todo va ligado a que haya artistas de alto nivel que interesen no sólo a los aficionados, sino a un público más general", y puso como ejemplo a la soprano rusa Ana Netrebko.