Este artículo se publicó hace 12 años.
La izquierda abertzale no hará "gestos para la galería" con las víctimas
El portavoz de la izquierda abertzale Hasier Arraiz ha explicado hoy que la autocrítica expresada el domingo en su último documento constituye "una línea de trabajo", pero no implica que este sector político vaya a hacer "gestos de cara a la galería" con las víctimas de ETA.
Arraiz y la también portavoz de la antigua Batasuna Maribi Ugarteburu han ofrecido una rueda de prensa en San Sebastián para analizar las reacciones suscitadas tras la presentación el domingo del documento "Viento de solución", en el que admitían que su posición política había podido causar dolor y sentimiento de "humillación" a las víctimas de ETA.
Los dirigentes abertzales han explicado que el ejercicio de autocrítica se concretará en "una línea de trabajo integral", que englobe "todo el sufrimiento ocurrido a lo largo de décadas de confrontación armada en Euskal Herria".
Preguntados por la concreción práctica de su reflexión sobre las víctimas, Arraiz ha aclarado que "lo que la izquierda abertzale no va a hacer es nada que sea un gesto artificial ni nada de cara a la galería".
Ugarteburu ha apostado por tratar la cuestión de las víctimas "como elemento positivo", situándolo "en el carril de las soluciones", ya que durante décadas se ha hecho "un uso y abuso del dolor" de los afectados por el terrorismo.
A este respecto, lo que la antigua Batasuna hizo el domingo fue "asumir su parte de responsabilidad en todas estas décadas de conflicto", un gesto que a su juicio deben imitar los demás.
Maribi Ugarteburu ha afirmado que, tras el "gesto" de la antigua Batasuna respecto a las víctimas de ETA, sería "un avance" que el Estado español "declarase que no va a utilizar más las armas" en el País Vasco, al tiempo que ha recordado que la izquierda abertzale apuesta ahora por la "desactivación definitiva de todas las armas".
En su opinión, el PP y el PSOE, los partidos que más han criticado la declaración de la izquierda abertzale, están "imponiendo su proyecto político haciendo uso de la violencia", ya que emplean, a su juicio, "la conculcación de los derechos humanos como único argumento político".
También han criticado el rechazo recabado por su propuesta de crear una comisión de la verdad y se han preguntado si quienes censuran esa idea "temen que se conozca toda la verdad".
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