Sólo es un voto, sólo es un diputado de una Cámara de 350, pero también cuenta para el Gobierno. Y, de momento, no está amarrado. José Luis Rodríguez Zapatero no puede contar con IU. Menos ahora que se conoce el detalle de una reforma fiscal que “castiga a las capas populares”, en lugar de a “los poderosos y al capital”. No es ese el modelo impositivo de IU, y buscará cambiarlo.

Lo dijo rotundo el coordinador, Cayo Lara, en la entrevista de ayer en Público, y lo repitió también ayer, en Rivas Vaciamadrid (Madrid) ante sus compañeros y los alumnos de la I Escuela de Formación de IU: “No apoyaremos los Presupuestos de 2010”.

La federación, no obstante, “no tirará la toalla”, no se abstendrá de corregir el rumbo de las Cuentas, certificó Lara en conversación con este periódico. La batalla se librará en la reforma fiscal, “el gran debate ideológico”.

IU presentará al Gobierno su propia propuesta: elevar del 43% al 50% el tipo máximo para ese 5% de los españoles que gana más de 60.000 euros al año; bajar un 25% el IRPF al 65% de los ciudadanos, los mileuristas, y mantener las tasas a las clases medias. Asimismo, pedirá que desaparezca el régimen de las Sociedades de Inversión de Capital Variable (Sicav) o que tributen más, y que no suban los tipos general y reducido del IVA.

Para Lara, Zapatero ha vuelto a mostrar su “falta de formalidad y fiabilidad” y su querencia por la política neoliberal que puede acabar “dando la llave de la Moncloa” a Mariano Rajoy. Al PP le afeó su “demagogia” por pedir más empleo con menos gasto y menos impuestos.