Este artículo se publicó hace 15 años.
Israel considera intercambiar presos palestinos por un soldado
El gabinete de seguridad del primer ministro israelí saliente, Ehud Olmert, se reunió el miércoles para discutir hasta dónde llegaría Israel para lograr la liberación de un soldado capturado intercambiando prisioneros con Hamás.
En las conversaciones mediadas por Egipto para alcanzar una tregua a largo plazo tras la ofensiva israelí del mes pasado en la Franja de Gaza, Olmert ha insistido en que la liberación de Gilad Shilat debe producirse antes de reabrir de la frontera del enclave gobernado por Hamás.
Hamás ha exigido la liberación de 1.400 prisioneros de cárceles israelíes, incluyendo algunos implicados en ataques mortales contra israelíes. El grupo ha rechazado cualquier relación entre Shalit y la apertura de los cruces de Gaza, que sería vital para los trabajos de reconstrucción.
"Necesitamos saber que hay un acuerdo en el que Gilad vuelve a casa. Eso es una condición básica. Si no, pues bueno, dejad sufrir a Hamás, no abrimos los cruces", advirtió en Israel Radio Meit Sheetrir, un miembro del gabinete de seguridad.
Shalit fue capturado en 2006 por milicianos palestinos. Hicieron un túnel hasta Israel desde la Franja de Gaza y le llevaron hasta el enclave, que las tropas y los colonos israelíes habían abandonado el año anterior.
Un funcionario israelí, hablando bajo condición de anonimato, señaló que el grupo discutiría "el precio que habrá que pagar por la liberación de Gilad Shalit", refiriéndose al número y nombre de prisioneros palestinos que podrían ser intercambiados.
"Estamos en el momento de la verdad. Si Gilad Shalit no viene a casa ahora, podría continuar durante años. Éste es el momento de oportunidad", añadió el funcionario.
"Queremos que esto termine. Queremos que esto ocurra", añadió, rechazando la idea de que la reunión el miércoles pudiera ser tan sólo el punto de inicio de las negociaciones.
Sin embargo, añadió que es improbable que cualquier plan apoyado por el gabinete de seguridad sea la última oferta del país, sugiriendo que Hamás podría hacer una contraoferta.
Sheetrir dijo antes de la reunión que tener de vuelta a Shalit podría suponer la liberación de cientos de prisioneros.
Antes de la reunión del gabinete, la aviación israelí bombardeó siete túneles de contrabando que cruzaban bajo la frontera de la Franja de Gaza con Egipto y un complejo de seguridad en territorio palestino, según un portavoz militar. No se ha informado de ninguna víctima.
El ataque se produjo después de que el martes se disparase una ronda de mortero a Israel desde Gaza. Nadie resultó herido.
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