Este artículo se publicó hace 15 años.
El huracán Ida pierde fuerza en el golfo de México
El huracán Ida perdió fuerza y se convirtió en una tormenta de Categoría 1, con vientos máximos sostenidos de 145 kilómetros por hora, mientras avanza por el golfo de México, dijo el lunes el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
El huracán causó 124 muertos en El Salvador debido a inundaciones y deslaves provocados por sus lluvias.
Las petroleras de Estados Unidos estaban cerrando su producción y evacuando a los trabajadores desde el golfo debido a la tormenta. Además, el petróleo subía el lunes más de un dólar sobre los 78 dólares por barril.
El Centro Nacional de Huracanes dijo que se esperaba que Ida se debilitara, pero que posiblemente seguirá siendo un huracán cuando se aproxime a la costa norte del golfo de México en la noche del lunes o madrugada del martes. Se prevé que toque tierra en alguna zona entre Luisiana y Florida.
Varios productores grandes cerraron parte de su producción de gas y petróleo como medida de precaución.
En el golfo de México se produce cerca de un cuarto de la producción de petróleo de Estados Unidos y 15 por ciento de la de gas natural. Además, en la costa del Golfo se ubica el 40 por ciento de la capacidad de refino del país.
En El Salvador, los ríos superaron de sus cauces y las faldas de algunos cerros colapsaron debido a las persistentes lluvias que dejó el paso de Ida, aislando algunas zonas del interior del resto del país. El Gobierno dijo que 124 personas murieron debido a deslaves e inundaciones que arrasaron decenas de casas.
LUISIANA EN ESTADO DE EMERGENCIA
El centro de huracanes con base en Miami emitió una alerta de tormenta desde Pascagoula, Mississippi, a Indian Pass, Florida, lo que significa que se pueden esperar condiciones de huracán en el área dentro de 24 horas.
Una alerta de tormenta tropical estaba vigente para zonas de Luisiana y Mississippi, incluida la ciudad de Nueva Orleans, que aún se recupera de la devastación provocada por el Huracán Katrina en el 2005.
Ida pasó sin que se reportaran víctimas ni daños en zonas turísticas claves del Caribe mexicano como Cancún, Playa del Carmen o Cozumel, donde descargó lluvias intermitentes con ráfagas de viento. Las autoridades de la zona ya levantaron las alertas a la población.
La tormenta descargó lluvias torrenciales a comienzos de la semana pasada en la costa caribeña de Nicaragua. Cerca de 5.300 personas permanecían aún en albergues y el presidente del empobrecido país, Daniel Ortega, dijo el sábado que pedirá préstamos por valor de cerca de 4,4 millones de dólares para resarcir los daños.
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